
La NASA y la agencia rusa Roscosmos tendrán que encontrar y reparar una pequeña fuga en la Estación Espacial Internacional por donde está perdiendo aire poco a poco la nave. Durante este fin de semana los astronautas a bordo de la estación se refugiaran en el módulo Zvezdá mientras aislan distintas partes de la nave para tratar de encontrar la fuga.
La agencia espacial se dio cuenta de que algo no iba bien en septiembre de 2019, cuando descubrieron que la Estación Espacial Internacional estaba perdiendo aire a un ritmo mayor de lo habitual, aunque la presión y la estabilidad de la nave no se han visto comprometidas gracias a los tanques de compensación que hay a bordo.
Los astronautas Chris Cassidy, Anatoly Ivanishin e Ivan Vagner serán los encargados de monitorizar la presión en los diferentes módulos a medida que los van aislando hasta encontrar la mencionada fuga.
No es la primera vez que aparece un problema de este tipo en la Estación Espacial Internacional. De hecho, todavía colea la polémica en torno al agujero aparecido en la EEI en el año 2018, donde se barajó incluso la posibilidad de un sabotaje.
Habrá que esperar a la semana que viene para conocer los resultados de la investigación sobre esta fuga de aire.