SpaceX se encuentra en medio de la preparación de su cohete Starship para su lanzamiento orbital inaugural, pero una aparente explosión del propulsor Super Heavy durante las pruebas en las instalaciones de la compañía en Boca Chica, Texas, puede representar un serio revés.
La explosión ocurrió alrededor de las 5:20 p.m. ET, y fue tan inesperado como severo. Aún no se sabe la causa de la anomalía o si alguien resultó herido durante el incidente. La explosión fue seguida por una cantidad significativa de fuego en las cercanías del cohete propulsor gigante; Todavía se podían ver llamas y humo saliendo de la plataforma de lanzamiento una hora después del incidente, pero la situación en el sitio de prueba no parecía estar empeorando.
No se esperaba una prueba de fuego estático hoy, y la plataforma de lanzamiento no había sido preparada ni autorizada para tal prueba (hasta donde sabemos). La ventilación directamente debajo del propulsor aumentó drásticamente en los momentos previos a la explosión, que produjo una poderosa bola de fuego y una onda expansiva. SpaceX no respondió de inmediato a nuestra solicitud de más información.
La compañía dirigida por Elon Musk actualmente está probando Super Heavy Booster 7 en sus instalaciones de Boca Chica, conocidas como Starbase. El propulsor prototipo, con sus 33 motores Raptor, llegó al monte de lanzamiento a fines de junio. Una segunda etapa de Starship eventualmente se apilará en la parte superior, formando un cohete Starship completamente apilado. Musk esperaba un vuelo de prueba orbital del sistema en julio, pero eso parece poco probable dados los eventos de hoy.
Es probable que el Booster 7 haya sufrido algún tipo de daño durante la explosión, ya sea en las docenas de motores Raptor o en el propulsor mismo. Probablemente ambos. SpaceX deberá reparar (o reemplazar) el refuerzo y determinar la causa de la anomalía. Tampoco está claro si el incidente dañó el soporte de lanzamiento, que está equipado con un par de brazos mecánicos conocidos como “palillos”, que levantan y mantienen el propulsor en su lugar.
SpaceX está diseñado para transportar carga y pasajeros a la órbita, la Luna y Marte. Actualmente, la compañía tiene un contrato con la NASA para modificar el sistema como un medio para aterrizar astronautas en la superficie lunar. La Administración Federal de Aviación (FAA) autorizó recientemente a SpaceX para la expansión del sitio, acercando a Starship a su lanzamiento inaugural.