
FoxConn, uno de los principales proveedores de Apple y un socio crítico en la fabricación del iPhone acaba de interrumpir la producción en la región tecnológica de Shenzhen. La razón es que los casos de Covid-19 se han vuelto a disparar en China después de dos años de relativa calma.
Los Campus de Foxconn en Shenzhen han cerrado por orden directa del gobierno de Pekín. El ejecutivo ha ordenado que todos los negocios no esenciales cierren hasta el próximo 20 de marzo. La ciudad de 17,5 millones de habitantes ha entrado en confinamiento y los trabajadores que pueden hacerlo han sido enviados a trabajar desde casa.
“Las operaciones de Foxconn en Shenzhen se han suspendido desde el 14 de marzo por orden de las autoridades locales en su lucha contra la Covid-19", nos explicó un portavoz de la compañía. “La fecha de reapertura será comunicada por el gobierno. Gracias a la producción diversificada en diferentes lugares de China, hemos ajustado la producción para tratar de minimizar su impacto potencial. Mientras tanto, hemos requerido a todos los trabajadores que se testeen además de las medidas de protección que ya estaban funcionando.”
China está sufriendo un rebrote considerable de casos de Covid-19. El pasado lunes, la Comisión Nacional de Salud del país país registró 1.437 nuevos casos. En Shenzhen se reportaron 75 nuevos casos el lunes, y 60 el domingo. No es mucho, pero es lo suficiente como para que tomen medidas drásticas. En los dos últimos años China había logrado mantener lo peor de la pandemia bajo control a pesar de ser el primer país atacado por el virus.

Hasta ahora, China había logrado mantener las cifras bajo control gracias a unas políticas de contención draconianas y a testear en masa a sus habitantes. Queda por ver si esas políticas lograrán contener la variante Omicrón que ha campado a sus anchas en otros países.
Cómo explican en Reuters, la principal fábrica de iPhone en China está en la ciudad de Zhengzhou, que todavía no ha entrado en confinamiento. La ciudad no ha reportado aún un aumento significativo de casos desde mediados de enero, fecha de su último cierre por Covid-19. En Shengzhen, Foxconn no ha sido la única compañía que se ha visto obligada a suspender operaciones. Unimicron Technologies, un proveedor clave de Intel, también está en pausa. Según Bloomberg, DJI, Huawei y Tencent también tienen plantas de producción allí, aunque aún no está claro cuál será el impacto del cierre.