Lo llaman efecto demo, y ocurre cuando la tecnología cuyo funcionamiento estás tratando de enseñar a millones de personas falla estrepitosamente en ese preciso momento. La última víctima del efecto demo ha sido Apple durante la presentación de su Face ID, pero ¿Qué paso en realidad en esa Keynote?
Para los que no sepan de qué estamos hablando, un breve resumen. Durante la presentación del iPhone X, Craig Federighi mostraba la que era una de sus novedades más potentes: el desbloqueo por identificación biométrica de la cara. “Desbloquear el teléfono es tan fácil como mirar el teléfono y deslizar la pantalla hacia arriba...” decía Federighi mientras mostraba su uso...
Tras unos incómodos instantes, el portavoz de Apple puso en reposo el terminal y recurrió a un segundo móvil de respaldo. Esta vez todo funcionó perfectamente, pero la comidilla de la presentación ya estaba ahí. El cacareado Face ID había fallado.
Internet no tardó en llenarse de especulación y sesudos análisis sobre la causa del fallo y el futuro de esta tecnología. Finalmente, Apple ha puesto fin a las teorías ofreciendo una explicación oficial tras analizar los registros del iPhone X que falló. El problema era muy simple. Los técnicos que prepararon el terminal no lo configuraron con la cara de Craig Federighi. ¡Oooops!
Cuando Federighi trató de desbloquear el terminal con su cara, la aplicación hizo lo que esta programada para hacer en estos casos: mostrar la pantalla para introducir la contraseña manualmente. No hubo fallo técnico, sino humano. Algún responsable técnico de la compañía ha debido recibir un buen tirón de orejas hoy. [vía Yahoo News]