En un trabajo publicado por la revista Science, investigadores del Regeneron Genetics Center, Duke University Medical Center y varias universidades han descubierto que las personas con una extraña mutación genética en el gen GPR75 tienen un 54 por ciento menos de riesgo de obesidad.
Tal y como la describen, la variante genética rara que parece actuar como una “superpotencia genética protectora” contra el aumento de peso. Para llegar a esta conclusión, los investigadores dividieron el estudio en dos partes. En primer lugar analizaron datos genéticos y de salud de 645.000 voluntarios del Reino Unido, Estados Unidos y México.
Cuentan que las personas que tienen al menos una copia inactiva del gen GPR75, que se ha inactivado por mutaciones de “pérdida de función”, tendían a pesar aproximadamente 5,4 kilogramos menos, tenían un índice de masa corporal (IMC) más bajo y se enfrentaban a un 54 por ciento menos de riesgo de obesidad que aquellos sin la mutación.
Por el contrario, las mutaciones protectoras fueron relativamente raras, apareciendo en aproximadamente una de cada 3.000 personas secuenciadas.
Los hallazgos iniciales se confirmaron posteriormente a través de otro experimento con ratones que habían sido modificados genéticamente para carecer de copias del gen GPR75. Estos ratones modificados ganaron un 44 por ciento menos de peso que los ratones sin la mutación cuando ambos grupos fueron alimentados con una dieta alta en grasas.
En su trabajo, el equipo recuerda que dado que los factores genéticos juegan un papel importante en el metabolismo, así como en la forma en que las personas adquieren energía y la almacenan como grasa, es evidente que ciertos genes influirán en el riesgo de desarrollar obesidad:
Sin embargo, ningún gen tiene la culpa. Estudios anteriores han identificado cientos de loci en el genoma que parecen estar relacionados con la obesidad y es probable que la forma en que influyen en el riesgo de obesidad sea profundamente compleja.
Sea como fuere, el descubrimiento podría proporcionar nuevos conocimientos sobre la base genética de la obesidad, y algún día podría ayudar a abordar esta epidemia mundial. Según los investigadores:
Descubrir superpoderes genéticos protectores, como en GPR75, brinda esperanza para combatir desafíos de salud global tan complejos y prevalentes como la obesidad.
“El descubrimiento de mutaciones protectoras ... nos permitirá desbloquear todo el potencial de la medicina genética instruyendo sobre dónde implementar enfoques de vanguardia como la edición de genes, el silenciamiento de genes y las tecnologías de vectores virales”, zanjaron. [Science vía IFLScience]