Construir una base en Marte con una pequeña flota (cuatro si atendemos a las ilustraciones) de cohetes BFR y en solo 10 años implica que la compañía debería empezar a solventar hoy mismo algunos de los retos necesarios para hacer eso realidad. El primero y mas importante es el propio cohete del que Musk ha compartido algunas ilustraciones más.

El reto más inmediato es lograr terminar los nuevos depósitos de combustible en fibra de carbono en lugar de aluminio aeronáutico. Después habrá que comenzar a enviar materiales a Marte para allanar el camino a la primera expedición. Un retraso en cualquiera de esos hitos supondría añadir más tiempo a esa fecha.

La meta, por supuesto, es aproximada, pero incluso con un margen de error de un par de años, la ambición de Musk excede incluso la del presidente Kennedy en 1961 cuando urgió al congreso de Estados Unidos a poner un hombre en órbita antes de que acabara la década. Estados Unidos lo logró, veremos si Musk lo logra. [vía Teslarati]