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A diferencia de los rovers tales como el Curiosity, el InSight no rodará ni se paseará durante largos recorridos sobre la superficie marciana, no. Este nuevo robot de la NASA está diseñado para estudiar, a profundidad, la composición geológica del planeta rojo, gracias a una sonda con la que está equipado que le permite analizar hasta los 5 metros de profundidad bajo la superficie, en las cercanías de donde aterrice. Supondrás, por supuesto, que el lugar de su aterrizaje va a ser calculado de forma muy precisa. Es de vital importancia.

Una vez en nuestro planeta vecino, estudiará los movimientos sísmicos y la temperatura bajo la superficie. InSight no anda buscando vida en Marte, de hecho, su ambición es mayor que la de cualquier rover hasta ahora, dado que sus estudios y análisis no se limitan al planeta rojo, sino que su propósito final es entender cómo se formaron los planetas del Sistema Solar, y han pasado más de 4.000 millones de años desde entonces.

La misión que llevará a InSight a Marte está pautada para despegar el mes de marzo del año 2016. Mientras tanto, imágenes como la anterior nos emocionan asegurándonos que el robot está siendo finalizado. [vía Insight]

Imágenes: NASA.

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