
Un grupo de paleontólogos ha revisado recientemente un montón de fósiles encontrados en una cantera de Sudáfrica, y han descubierto dos especies previamente desconocidas de tigres dientes de sable.
La cantera de Langebaanweg ‘E’ es una mina de cielo abierto que hay desde 1965 en la costa oeste de Sudáfrica, y donde se han encontrado una sorprendente cantidad de fósiles de vertebrados. Los fósiles que han encontrado en ella se sitúan entre el Mioceno y el Plioceno, hace poco más de 5 millones de años.
Los investigadores tomaron una serie de datos de los felinos que habían encontrado (medidas de sus cráneos, mandíbulas, dientes, etc.) y realizaron un árbol genealógico de los tigres dientes de sable para determinar sus interrelaciones. La investigación del equipo ha sido publicada ahora en iScience.
“Una de las posibles implicaciones de esta investigación es que, al estudiar el conjunto de félidos de Langebaanweg, incluidos los tigres dientes de sable y los félidos de tipo caracal y serval, hemos podido inferir que el entorno se estaba abriendo”, dijo el coautor del estudio Alberto Valenciano, paleontólogo de la Universidad Complutense, en un correo electrónico a Gizmodo.
Las nuevas especies han sido bautizadas como Lokotunjailurus chinsamyae y Dinofelis werdelini. También encontraron especies previamente conocidas en el yacimiento, como los Adeilosmilus aff. kabir y los Yoshi obcura. El equipo que acuñó el género Yoshi escribió en 2015 que estos animales se “caracterizaban por un cráneo redondo, corto y profundo, y caninos cortos algo comprimidos transversalmente aunque no dentados”.
Teniendo en cuenta investigaciones anteriores, el equipo esperaba encontrar una nueva especie de Dinofelis, pero el descubrimiento de este nuevo Lokotunjailurus lejos de Kenia y Chad fue una sorpresa.
La presencia de tigres dientes de sable más grandes y más rápidos en Sudáfrica sugiere que el ambiente en el sur del continente era el adecuado para ellos, una posible indicación de que al menos parte de la región estaba transicionando entre un ambiente boscoso y un ambiente de pastizales.
“Hace entre 7 y 5 millones de años África experimentó un cambio más continuo hacia un ecosistema más abierto, de pastizales áridos o desérticos desde finales del Mioceno hasta el Plioceno, en contraste con lo que sucedió en Europa y Asia”, agregó Valenciano. “La continua aridificación a lo largo del Mioceno y el Plioceno, que incluye la expansión de ambientes abiertos, podría ser un desencadenante importante del bipedalismo de los homínidos”.

Actualmente, no hemos encontrado ninguna conexión directa entre los félidos africanos y la evolución de los homínidos, pero este equipo de investigadores asegura que los mismos factores que permitieron a los tigres dientes de sable diversificarse y moverse con mayor libertad pudo haber empujado a los homínidos a volverse bípedos.
No hay duda de que los grandes felinos como los dientes de sable y los antiguos homínidos interactuaron en el pasado. Sin ir más lejos, en junio un grupo de paleoantropólogos anunció que había descubierto un hueso de la pierna de un homínido que había sido masticado por otro homínido (una especie de forma de canibalismo). Pero lo que también resultaba interesante es que aquel el hueso también tenía marcas de dientes de grandes felinos, lo que indica que estos últimos se había encontrado antes o después de la muerte del desafortunado homínido.
Existen pruebas de la existencia de tigres dientes de sable hace casi 50 millones de años, apenas 16 millones de años después de la extinción de todos los dinosaurios no aviares, y las pruebas sugieren que estos animales se fueron diversificando con el tiempo.
Aunque no está del todo claro por qué se extinguieron los tigres dientes de sable tras el Pleistoceno, afirma Valenciano, “tiene que estar relacionado con los cambios ambientales y con la aparición de los grandes felinos sociales (leones), que se convirtieron en el principal depredador de dichos ecosistemas.
“En el caso de África, los tigres dientes de sable vivieron hasta el Pleistoceno con especímenes como el Megantereon y llegaron a convivir con leones y leopardos”, añadió.