Si en la década de los 80 y principios de los 90, un momento de la historia donde no era raro encontrar grupos de jóvenes en la calle escuchando música en sus equipos “portátiles” alimentados por una cantidad de pilas indecente, te dicen que un altavoz, no solo iba a superar con creces el sonido sin necesidad de pilas, si no que lo ibas a poder meter literalmente en el agua, probablemente hubieras pensado que te estaban tomando el pelo o que era ciencia ficción.
Eso y mucho más es lo que ofrece el fantástico Boombox 3 de JBL.
Lo cierto es que el mercado de este tipo de altavoces es extremadamente variado y algo saturado, y para el consumidor se hace complicado elegir uno. Sin embargo, el Boombox 3 de JBL es mucho más que una actualización de su anterior modelo, el JBL Boombox 2.
En realidad, lo tiene casi todo para convertirse en una pieza codiciada entre los altavoces Bluetooth con los que pasar de una fiesta a un fiestón, y son una estupenda elección para estas navidades.
Diseño continuista y “acuático”
El diseño del equipo nos recuerda claramente que estamos ante una actualización o generación superior del Boombox 2, de ahí que guarde grandes similitudes como ese asa de aluminio de transporte incorporada. En ese sentido, debo admitir que todo el material que lo recubre da sensación de robustez y bien construido.
El cuerpo del altavoz también se muestra sólido, envuelto en su mayor parte en una especie de tela sellada. Como es habitual en la marca últimamente, luce un gran logotipo de JBL en el frente, y debajo de este hay una pequeña luz LED que actúa como indicador de duración de la batería.
En la zona superior frontal también encontramos los botones de control directo como el modo PartyBoost (para vincular con otros altavoces JBL), bajarvolumen, encendido, emparejamiento de Bluetooth, subir volumen y reproducir/pausar (o saltar a la siguiente pista cuando lo presionas dos veces).
En la zona posterior encontramos el área de las conexiones algo “escondida” a través de una tira que alberga un conector para el cable de alimentación (incluido), un puerto USB-A para cargar otros dispositivos y una entrada auxiliar de 3,5 mm.
Un equipo que llega con la clasificación IP67 de resistencia al polvo y al agua, aunque en este punto nos tenemos que detener porque no solo es resistente al componente líquido. El Boombox 3 se puede meter literalmente en una fiesta con piscina, ya que certifica que es completamente hermético al polvo y sumergible hasta un metro de agua durante media hora. Dicho de otra forma, se trata de un plus que lo sitúa como una más que aceptable opción para llevártelo a la playa o a un evento con piscina. Es más, el equipo incluso flota en el agua, así que en teoría no tienes que preocuparte de que caiga en agua por accidente.
Volviendo al diseño, desde JBL nos han prestado el modelo negro, pero también lo podemos encontrar en una versión “camuflaje”. En ambos casos hablamos de un peso total de 6,9 kg, por tanto, es portable y funciona a través de cable de alimentación o por carga a través de su batería.
Sonido amplificado, equilibrado y ahora con un subwoofer
Posiblemente, la principal diferencia en cuanto a sonido con su predecesor sea la inclusión del subwoofer, lo cual no es poca cosa. Según JBL, hay pequeñas diferencias para los modos de uso a través del cable de alimentación o batería. Con el primero obtenemos 80 W para el subwoofer, 40 W para los controladores de rango medio y 10 W para cada uno de los tweeters. En cambio, para el uso en batería la potencia disminuye ligeramente: 60 W para el subwoofer, 30 W para los controladores de rango medio y 8 W para cada tweeter. Mi opinión: apenas aprecié cambios utilizando ambos modos.
Más datos técnicos. El modelo es compatible con Bluetooth 5.3 y admite solo el códec SBC (curiosamente no admite AAC), pero puedo asegurar que para utilizarlo al aire libre, principal razón de ser del dispositivo, no llegamos a apreciar ninguna pérdida ni distorsión aguda. Con una carga completa (lleva alrededor de 6 horas desde el 0%) el equipo suele durar una media de un día entero (24 horas), aunque como siempre en este tipo de pruebas, dependerá de varios factores como el volumen al que estemos reproduciendo.
Durante las pruebas realizadas no encontré grandes pegas a lo que estaba escuchando mezclando todo tipo de géneros La respuesta de frecuencia fue buena y tiene un sonido bastante equilibrado, aunque por razones obvias, esta última generación viene marcada por esos graves profundos y altos. Dicho esto, en el rango medio también es muy lineal y tampoco encontré distorsiones a la hora de obtener un sonido claro, tanto en voces como en instrumentos principales.
Una app para personalizar el sonido
Y si queremos sacarle aún más partido al equipo, no hay altavoz que quiera ser alguien que no llegue con una app debajo del brazo. La de JBL nos permite tener un control adicional pudiendo personalizar nuestro perfil de sonido gracias al ecualizador gráfico de tres bandas que se incluye en JBL Portable (disponible para Android e iOS).
Por supuesto, no hablamos de una capa de personalización del sonido muy profesional, pero sí lo suficientemente sencilla para cualquier usuario y con la capacidad de apreciar los pequeños cambios que hagamos. Son cinco posiciones para las bandas de graves, medios y agudos con las que podemos jugar para modificar los parámetros de fábrica.
Por último, la app también nos permite ver la duración restante de la batería del altavoz y actualizar el firmware de estar disponible.
¿Me lo compro?
En resumen, esta actualización es mucho más de lo que cabría esperar del modelo anterior. La Boombox 3 de JBL es un altavoz Bluetooth que tiene todo lo que el usuario medio podría querer para llevárselo de fiesta: graves atronadores y contundentes si se quiere, pero también medios y agudos equilibrados a través del ecualizador, por lo que podemos conseguir en todo momento un conjunto muy completo con una duración de batería tras carga bastante generosa.
Por supuesto, todo esto tiene un coste. Su precio base es de 579 euros, aunque en esta época de compras navideñas lo puedes adquirir a un coste más bajo con un par de búsquedas de ofertas en la red.
Si buscas un equipo portable potente para llevártelo de fiesta, y el dinero no es un impedimento, la Boombox 3 no te defraudará.