
Samsung llega a Barcelona seis meses después de la debacle del Note 7. El MWC ha sido otras veces el lugar elegido para actualizar su emblemática gama de teléfonos Galaxy, pero después de las explosiones y con el jefe en la cárcel, la compañía ha decidido centrarse en algo menos relevante.
Así que, en lugar del Galaxy S8, Samsung ha anunciado un portátil 2-en-1 con Windows 10 y una tablet con Android. El 2-en-1 se llama Galaxy Book y es posible que sea el mejor producto que ha sacado Samsung en un tiempo.
El nuevo Samsung Galaxy Book supone una importante mejora respecto al portátil que reemplaza, el TabPro S. Al igual que el Galaxy TabPro S lanzado el año pasado, el Book es un dispositivo tipo Microsoft Surface con teclado desmontable, pero que ha sido actualizado con un procesador Kaby Lake y algunas mejoras notables en el teclado.
Además ahora viene en dos versiones: una de 10 y otra de 12 pulgadas. El TabPro S solo llegó al mercado con una pantalla de 12. No se sabe nada aún sobre precio o disponibilidad, pero el TabPro S costaba $900 cuando se lanzó a principios del año pasado. Se espera que el Galaxy Book de 10 pulgadas sea más barato que el modelo de 12 pulgadas. Además, a diferencia del otro, el de 10 pulgadas no será compatible con vídeo HDR.
El Galaxy Book no va a ser el único dispositivo de Samsung que soporte HDR este año. Samsung también ha anunciado una nueva tablet Android, la Galaxy Tab S3, con altavoces sintonizados por AKG para mejorar (supuestamente) el sonido. Tanto su parte frontal como la trasera están hechas de cristal, en línea con la estética general de los Galaxy (tomen nota del diseño brillante, porque probablemente lo volveremos a ver cuando se anuncie el Samsung Galaxy S8).
La tablet también reproduce contenido HDR y, al menos en la demostración que nos ha hecho Samsung, las mejoras se hacen notar de inmediato. Las puestas de sol parecían florecer en la pantalla sAMOLED mientras las cosas usualmente ocultas en las sombras quedaban a la vista.
La tablet tiene también un nuevo teclado que se parece al del iPad Pro, pero es infinitamente más agradable al escribir. Y al igual que el Galaxy Book, la Tab S3 viene con su propio lápiz.
Pero esta pieza de hardware tan bonita no responde a la gran pregunta que se cierne sobre ella: ¿quién diablos va a comprar una tablet Android? Mientras que el Galaxy Book tiene un mercado definido, la Tab S3 entra en la tierra baldía en la que se ha convertido el mercado de tablets Android. Todos los demás dejaron de fabricar tablets Android porque los consumidores simplemente no las compraban.