Contaba hace unos años el New York Times que la Gran Manzana tenía entre sus peculiaridades una especie de prisión-barcaza. En realidad, esta rareza estaba destinada a un tiempo limitado, pero fueron pasando los meses y los años y, The Boat, como se la conoce, sigue frente a la costa de Hunts Point en el Bronx.
Hablamos del “barco penitenciario” Vernon C. Bain Correctional Center, el mismo que también se encuentra en el Libro Guinness de los Récords como el barco penitenciario operativo más grande del mundo. Curiosamente, ni siquiera muchos de los neoyorquinos conocen su historio (o existencia).
The Boat se construyó como resultado del hacinamiento en las prisiones de la década de 1980 en Nueva York. Con el tiempo y el paso de los años, ha evolucionado para albergar diferentes tipos de reclusos y, en cierto modo, no es diferente a una prisión ordinaria.
¿Y cuándo comenzó la historia del barco prisión flotante? Para ello tenemos que remontarnos 1992, momento en que The Boat se construye en Nueva Orleans. Nombrado en honor a un alcaide reconocido que murió en un accidente automovilístico, el Centro Vernon C. Bain fue la solución ideada por la administración del alcalde Edward Koch a un grave problema.
A finales de 1980, las cárceles y prisiones de la ciudad de Nueva York estaban llenando su capacidad máxima y no había ningún lugar en el terreno para expandirse. ¿Solución? Crear barcazas cárcel, la primera de las cuales llegó en 1988.
El Bibby Resolution y el Bibby Venture fueron anteriormente transportes de tropas británicas reutilizados como cárceles. Dos barcos que se vendieron en 1994, cuando el Vernon C. Bain Center de 47.326 toneladas llegó al East River para reemplazarlos.
Hoy, The Boat se utiliza como un centro de procesamiento y detención temporal. Una enorme “nave” que puede albergar aproximadamente a 800 reclusos de seguridad media a máxima. Además, cuenta con 5 pisos y tiene una biblioteca, salas de recreación, tres capillas, un centro médico y una cancha de baloncesto en la cubierta superior. De ahí que ostente ese récord al buque-prisión operativo más grande del mundo en 2014.
Por último, y para aquellos que quieran saber dónde está ubicado exactamente, The Boat se encuentra en medio de una zona industrial que también alberga el mercado de pescado de Fulton. El acceso a la barcaza es difícil debido a la seguridad, e incluso el camino a la entrada está en muy mal estado. De ahí que la mejor manera de ver la cárcel flotante sea en barco. [Half As Interesting, New York Times]