El vídeo fue un encargo de la revista ARTE. Haegelin dice que prepararlo le llevó apenas una semana, con dos días para el rodaje y otros dos para limpiar el desastre. Además de un loop perfecto, cuenta con algunos de los efectos más espectaculares de su largo historial de cortos. En su cuenta de Instagram puedes ver los demás, así como varios “making of” para entender cómo trabaja con la plastilina y otros materiales.

El Tom Cruise de carne y hueso aún no se ha pronunciado sobre su homólogo de plastilina, pero dudo que esté contento con la enorme nariz que le han puesto.