Sina Estavi es un “criptoemprendedor”. El año pasado compró un token digital vinculado al primer tweet del fundador de Twitter, Jack Dorsey. Pagó 2,9 millones de dólares por él, y este mes trató de hacer valer su “inversión”, sacándola a subasta con la expectativa de que podría generarle $48 millones. No ocurrió.
Según informa CoinDesk, Estavi puso a la venta el NFT el 9 de abril con la esperanza de obtener alrededor de 50 millones de dólares por él, y donar “al menos $25 millones” a la caridad. Pero es una suma muy ambiciosa para algo que podemos ver, descargar y/o disfrutar a continuación por solo unos segundos de nuestro tiempo:
Estavi sacó a subasta el NFT, y del puñado de postores que participaron, la oferta más alta fue de... 277 dólares. Tras ampliar el plazo ha llegado una oferta posterior por $6200, todavía muy lejos de los $2,9 millones, y mucho más de los $48 millones. “El plazo que fijé había terminado, pero si recibo una buena oferta, podría aceptarla. Quizás nunca lo venda”, dijo Estavi a CoinDesk.