
Las bacterias nos acompañan a todas partes, incluso hasta el espacio, pero parece que lo de viajar tan lejos produce modificaciones mucho más profundas de lo que pensábamos hasta el punto de ser un caldo de cultivo para nuevas especies. Acabamos de descubrir tres completamente nuevas a bordo de la ISS.
Los responsables del descubrimiento son un equipo de investigadores de la Universidad del Sur de California dirigidos por el genetista Swati Bijlani. Las bacterias nuevas han aparecido en un panel de control, en la cúpula del módulo de observación, sobre una mesa de comer, y en el interior de un viejo filtro HEPA devuelto a la Tierra en 2011. La bacteria del filtro es una variante de una especie conocida llamada Methylorubrum rhodesianum, pero las otras tres, de la misma familia, eran desconocidas hasta ahora. Sus descubridores han propuesto llamarlas Methylobacterium ajmalii en honor al científico indio Ajmal Khan.
Ninguna de estas bacterias entraña riesgo para la salud de los seres humanos. Se trata de microorganismos benignos que normalmente se encuentran en el suelo y que contribuyen a crear las condiciones químicas necesarias para que otros organismos como las plantas se desarrollen.
De hecho el descubrimiento, lejos de ser preocupante, es muy esperanzador, porque significa que la vida bacteriana es capaz de adaptarse a condiciones tan extremas como la microgravedad del espacio. Una de las bacterias recién descubierta tiene un gen que influye en la producción de la enzima citoquinina, que a su vez permite el crecimiento de las raíces en el suelo.
Los investigadores creen que estas bacterias serán la clave para desarrollar mejores técnicas de cultivo en microgravedad que nos ayuden a producir alimentos en viajes espaciales largos. Aún hay más de mil muestras de la ISS sin estudiar esperando a que las examinen en la Tierra, así que es muy probable que siga habiendo descubrimientos asombrosos en los próximos años. [Frontiers in Microbiology vía Science Alert]