
Aunque dicen que los mitos siempre tienen una parte de verdad, la mayor parte de las veces se exageran o embellecen a medida que pasa el tiempo. Esto no aplica a James Cameron. Al menos no aplica a cómo el director se hizo con la secuela de la venerada película de Ridley Scott.
La historia es la siguiente: James Cameron estaba una sala rodeado de ejecutivos de la 20th Century Fox. El director se levantó, fue caminando hasta la pizarra blanca y escribió: “ALIEN” en ella. A continuación hizo una pequeña pausa...
Entonces escribió una letra s al final de la palabra, con lo que quedó en “ALIENS” e hizo otra pequeña pausa para que ninguno de los presentes se perdiera.
Finalmente añadió dos líneas verticales a la S, convirtiendo la palabra en ALIEN$.
El director confirmó esta anécdota durante una entrevista a CinemaBlend, aunque confirmó que también dijo algunas palabras. “Estaba sentado con tres productores en el despacho del presidente de 20th Century Fox”, explicaba Cameron. “Entonces les dije: tengo una idea para el título. Es algo así... y entonces escribí alien en letras mayúsculas y le añadí una s al final y les dije: Quiero llamarla Aliens porque ahora no se enfrentan a uno. Se enfrentan a un ejercito. Es la principal diferencia, y es una muy simple y muy gráfica. Entonces dibujé dos líneas en la S para convertirla en el símbolo del dólar y aparentemente funcionó, porque eligieron mi título y nunca cuestionaron nada al respecto”.
Conviene recordar que, en aquel entonces, Cameron solo había dirigido dos películas: Terminator y Piranha II: The Spawning. El sencillo truco del director resulta hilarante a día de hoy, pero le valió la dirección de la secuela de la que ya se consideraba un clásico de culto, la Alien original de Scott, que encima había hecho 80 millones de dólares de la época (300 millones en la actualidad). Si eso no es $aber convencer, no se qué lo es.