Finlandia comparte una larga frontera con Rusia, por lo que se encuentra con una gran cantidad de yates con orígenes turbios en sus muelles. Los funcionarios se movieron rápidamente, impidiendo que 21 yates salieran de su almacenamiento de invierno esta semana.
Finlandia se está poniendo dura con las sanciones. El comercio ha caído más entre Finlandia y su vecino Rusia que cuando colapsó la Unión Soviética en 1991, dijeron funcionarios de aduanas esta semana. Entonces, cuando tuvo la oportunidad de detener 21 yates que posiblemente pertenecían a oligarcas rusos, los funcionarios actuaron rápidamente. Es muy probable que no todos esos yates pertenezcan a oligarcas, pero tampoco es imposible. Tomará algún tiempo averiguarlo, ya que estos barcos tienden a tener su verdadera propiedad oculta en un laberinto de trámites burocráticos legales. De Insider:
El departamento de aduanas comenzó a informar a las instalaciones de almacenamiento de invierno sobre la decisión la semana pasada, según Helsingin Sanomat, que fue el primero en informar la noticia.
“No son barcos que tendría un ciudadano común, pero tampoco tienen 150 metros de largo”, dijo a Bloomberg Sami Rakshit, jefe del departamento de aplicación.
“No asumimos que todos los yates detenidos están sujetos a sanciones, pero eso es lo que estamos tratando de determinar ahora”, agregó.
Mikko Pellikka, director ejecutivo de Yachtcare Finlandia, le dijo a Helsingin Sanomat que su empresa tenía cuatro yates almacenados en el puerto de Loviisa.
“Es difícil interpretar si los barcos son rusos porque están registrados en todo el mundo”, dijo. “No podemos decir quién es el propietario final del barco. Los documentos oficiales no necesariamente leen los nombres de las personas”.
Es bien sabido, por ejemplo, que el presidente ruso, Vlad Putin, en realidad no posee mucho a su nombre, informa el New York Times, y eso es cierto para muchos otros oligarcas, que utilizan sociedades de cartera y entidades legales ficticias para frustrar a los investigadores financieros.
Veintiún yates es un buen botín, pero un montón de barcos no se puede comparar con la captura de un pez realmente grande en Italia la semana pasada; el Scheherazade, un superyate de $ 700 millones que los investigadores creen que pertenece al mismo Putin. Fue incautado por funcionarios italianos en la ciudad portuaria toscana de Marina di Carrara. Uno de los 14 grandes yates de propiedad privada en el mundo, el Scherezade parece pertenecer a Putin, pero pasará mucho tiempo antes de que se pruebe de manera inequívoca.