La semana pasada, una broma racista que se originó en un rincón de Internet se salió rápidamente de control y, en poco tiempo, los políticos franceses y los canales de noticias griegos, entre otros, informaron erróneamente que una fotografía antigua del legendario diseñador de juegos Hideo Kojima era en realidad una foto de Tetsuya Yamagami, el hombre de 41 años que asesinó el viernes al ex primer ministro japonés Shinzo Abe.
Digo “broma”, pero eso realmente está haciendo un flaco favor a las cosas que son remotamente divertidas, ya que no había absolutamente nada que vinculara a los dos hombres, en términos de apariencia o de otra manera, aparte del hecho de que ambos eran japoneses.
Esta fue la cobertura de Zack informando de las noticias el viernes:
Poco después del asesinato de hoy, algunos en Internet bromearon diciendo que el presunto asesino de Abe se parecía a Kojima. Eventualmente, esto llegó a Twitter, donde el político francés de extrema derecha Damien Rieu, quizás sin entender que era una broma, retuiteó imágenes de Kojima con un comentario que se traduce como “La extrema izquierda mata”, ayudando a difundirlo más. Si bien Rieu finalmente eliminó los tuits, parece que el daño ya estaba hecho y podría haber ayudado a engañar al menos a una estación de noticias en Grecia que cubrió el asesinato.
Obviamente, es un reportaje increíblemente peligroso, especialmente porque se trata de alguien que ya está en el ojo público, por lo que Kojima Productions emitió un comunicado el viernes por la noche diciendo:
Kojima Productions condena enérgicamente la difusión de noticias falsas y rumores que transmiten información falsa. No toleramos tal difamación y consideraremos emprender acciones legales en algunos casos.
Desde entonces, el político francés de extrema derecha Damien Rieu eliminó sus tuits, y el canal de noticias griego ANT TV1 también eliminó su video con la fotografía. No se sabe en el momento de la publicación, sin embargo, hasta qué punto se ha extendido esta información errónea y cuántas personas vieron los informes originales de ambos y aún no han visto ninguna de las correcciones realizadas.