
Toxoplasma gondii, uno de los parásitos más comunes del mundo, podría estar manipulando las características fenotípicas de sus huéspedes para que se vuelvan más atractivos y mejoren su éxito reproductivo, según un extraño estudio revisado por pares.
Los parásitos son uno de los factores que más negativamente afectan a nuestra salud, pero si disminuyeran la salud de un huésped hasta tal punto que encontrar pareja se volviera imposible para él, entonces el parásito también disminuiría sus posibilidades de reproducirse y pasar a la siguiente generación.
Aunque había pruebas de que T. gondii manipula las características fenotípicas de sus huéspedes para aumentar su propagación, un nuevo estudio dirigido por Javier Borráz-León, de la Universidad de Turku, y publicado en PeerJ, es el primero en investigar si este parásito que afecta a la mitad de la población mundial puede volver más atractivos a los humanos para aumentar su éxito.
35 personas infectadas con T. gondii fueron comparadas con 178 personas no infectadas, tanto por su atractivo autopercibido, su índice de masa corporal, la simetría de su cara y el número de parejas sexuales, como por el atractivo y la salud percibida por 205 evaluadores independientes, que no sabían quiénes estaban infectados.

El estudio encontró que los hombres infectados con T. Gondii tenían caras más simétricas, y las mujeres un índice de masa corporal más bajo, así como un mayor atractivo autopercibido y una mayor cantidad de parejas sexuales que los no infectados. Además, tanto las mujeres como los hombres infectados fueron percibidos como más atractivos que los no infectados por los evaluadores independientes.
Si bien podría ser un subproducto de la infección y no el resultado de una manipulación del parásito para aumentar su propagación a nuevos huéspedes, los resultados del estudio sugieren que parásitos de transmisión sexual como T. gondii podrían producir cambios en la apariencia y el comportamiento de un huésped humano.
Estudios anteriores encontraron que T. Gondii, común en los gatos domésticos, llega a modificar el comportamiento de ratones para volverlos más imprudentes, y por tanto más propensos a acabar en las garras de un gato.
En cuanto al atractivo sexual, también se observó en un estudio de 2011 que T. gondii produce algunos cambios en los niveles de testosterona de las ratas macho, que se vuelven sexualmente más atractivas y preferidas como parejas sexuales por las hembras no infectadas.
Es habitual que T. Gondii pase a los humanos a través de las heces de los gatos. En humanos, este protozoo puede alojarse en el cerebro y quedar latente durante años. La toxoplasmosis se vincula con jaquecas, trastorno bipolar y esquizofrenia. Es especialmente peligrosa en mujeres embarazadas, porque puede provocar alteraciones graves en el cerebro del feto.
La infección se puede tratar, pero T. Gondii es un parásito especialmente resistente y difícil de eliminar por completo del organismo. Eso sí, en muchos casos no desarrolla síntomas (salvo, tal vez, volverte más atractivo).