
Es raro que Apple haga un producto a un precio razonable y además sea excelente. Los AirPods (los amas o los odias) son un ejemplo de que eso está sucediendo. El nuevo iPad es otro. Es un buen producto, no un producto genial. Pero es probable que sea el único iPad que necesitas.
Antes de entrar en materia, debo admitir que el argumento de venta de Apple para el nuevo iPad funcionó conmigo. La compañía lo anunció hace dos semanas en un evento de gran fanfarria en Chicago enfatizando que este iPad es especialmente bueno para las escuelas ya que cuesta $330 ($300 para estudiantes y profesores) y tiene soporte de Apple Pencil. No soy profesor ni estudiante, pero esto me pareció muy importante. El Apple Pencil está considerado el mejor stylus para tablets y me sentí atraído por él. Sencillamente, el iPad es más útil si puedes escribir con facilidad. Hasta ahora, el modelo de iPad más barato no era compatible con el Pencil, era algo exclusivo del iPad Pro, por lo que el valor agregado realmente se siente valioso. (El Pencil, eso sí, te costará $100 adicionales).
Después de usar el nuevo iPad durante una semana, estoy convencido. El Pencil es genial y entretenido. Me gusta dibujar, y dibujar con el Pencil es una maravilla. (No he probado stylus de terceros como el 53 Pencil o el Adonit Mark, así que no puedo decir personalmente si son mejores). Sin embargo, la propuesta del nuevo iPad es mucho más que la compatibilidad con el Pencil. El nuevo iPad es rápido y potente, pero también ligero. El diseño no es diferente al modelo anterior, pero si estás pensando en actualizar desde, digamos, un iPad 2, notarás una gran diferencia.
De hecho, es de donde vengo. Hace muchos años compré mi primer iPad, un iPad 2. Lo odiaba. Era pesado. La pantalla era una mierda. No podía entender cómo o para qué usarlo. En ese momento, pensé que no lo necesitaba, y tenía razón. Así que lo vendí y seguí leyéndolo todo desde mi iPhone.

Siete años después, estoy harto de hacer la mayor parte de mis asuntos informáticos en un dispositivo del tamaño de una galleta salada. En casa, cada vez me siento más atraído por la idea de hacerme con una pantalla más grande que siga cabiendo en las manos. Y seré el primero en admitir que llego tarde a este razonamiento. Todo el mundo tiene una tablet. Bien por ellos. Pero nunca me convenció eso de de gastarse $600 o más en algo que no era muy diferente al teléfono que ya había comprado por $600 o más. Los iPads más baratos de Apple siempre se sintieron como una versión rebajada de lo que ya había en mi bolsillo. Ese ya no es el caso.
El iPad nuevo y barato es tan poderoso como un iPhone 7, el dispositivo que entregué hace unos meses cuando actualicé a un iPhone X. ¡Eso es suficiente para mí! Si bien el nuevo iPad no se siente tan ágil como el teléfono insignia de Apple, está muy cerca. Está tan cerca que no puedo imaginar por qué iba a pagar el doble para actualizar a un iPad Pro. Hay algunas mejoras de hardware si optas por el modelo profesional, como el doble de RAM (el nuevo iPad solo tiene 2 GB) y el conector inteligente para teclados. Pero realmente no necesito nada más. El nuevo iPad de 9.7 pulgadas es ligeramente más pequeño que el iPad Pro de 10.5 pulgadas (que cuesta $650), pero tiene exactamente el mismo peso. Cuenta con un chip A10 Fusion que es un poco menos inteligente que el chip A10X Fusion del iPad Pro, pero la diferencia no significa mucho para mí. Lo repito: el nuevo iPad es suficiente para mí, y probablemente sea suficiente para ti también.

Déjame replantearlo como una proposición. Si quieres comprar un iPad ahora, es una mala idea pagar por el Pro. Todos esperan que Apple estrene un nuevo iPad Pro con Face ID en un par de meses. Como firme creyente en la conveniencia de esta característica, creo que vale la pena esperar a ese iPad más poderoso y mucho más caro con Face ID. Si estás dispuesto y puedes gastarte $650 en una tablet, adelante. Sin embargo, si quieres la opción con mejor calidad/precio, el nuevo iPad tiene mucho sentido. Viene con Touch ID de primera generación, que es lento y engorroso en comparación con la segunda generación o con Face ID. Pero tampoco sacas el iPad de tu bolsillo un millón de veces al día.
Podrían preocuparte esos míseros 2GB de RAM. Es justo. Si bien puedes usar tres aplicaciones en la misma pantalla con un iPad Pro, solo puedes usar dos aplicaciones a la vez en el iPad más barato. Eso no significa que no puedas tener múltiples aplicaciones ejecutándose en segundo plano en el nuevo iPad. Simplemente no puedes abrir más de dos a la vez en la pantalla, a diferencia del iPad Pro que puede abrir tres. Francamente, nunca quise usar más de dos, ya que mis necesidades son leer, tomar notas y mirar videos. Puedes mandar mensajes mientras miras una película en el nuevo iPad, lo cual es útil, y funciona muy bien. Si necesitas más, puedes gastar el doble en un iPad Pro.

En definitiva, esto es una crítica positiva. Es refrescante que Apple lance un producto que funciona muy bien y no compromete el futuro financiero de tu familia. No estaba seguro de querer un iPad, básicamente, desde que salió el primer iPad. Pero este me gusta. Es una sensación extraña porque hay gadgets demasiado caros ahí fuera. Cuando salga el próximo iPad Pro, dudo que lo quiera porque costará demasiado. Pero a esto, me sorprende admitirlo, Apple le ha puesto un buen precio.
En resumen
- Hace todas las cosas bonitas que hace cualquier iPad
- Es mucho más barato que el iPad Pro
- Funciona con el Apple Pencil
- Es mucho más barato que el iPad Pro