Ayer, la Administración Federal de Aviación de los Estados Unidos confirmaba a Gizmodo que estaba evaluando prohibir el Galaxy Note 7 en aviones ante el riesgo de incendio o explosión. Frente a ello, algunas aerolíneas han decidido tomar la iniciativa y no prohibir el teléfono pero sí la carga del mismo durante el vuelo.
Según confirmaron primero varios usuarios de Qantas y luego un representante de la compañía la aerolínea pidió a los viajeros antes del despegue de cada avión que no cargasen el Galaxy Note 7 : “Siguiendo con la decisión de Samsung de retirar todos los Samsung Galaxy Note 7 estamos pidiendo a los pasajeros que eviten cargarlos en el vuelo”.
Hasta ahora, y aunque tampoco es que tenga mucho margen de maniobra, la gestión del incidente por parte de Samsung ha sido más que correcta: los usuarios afectados de Galaxy Note 7 recibirán una tarjeta regalo de $25 dólares o un descuento de la misma cantidad en su factura como “compensación” y los nuevos dispositivos de reemplazo comenzarán a entregarse a partir de la semana que viene, aunque es un plazo que varía según el país.
Del mismo modo, el Note 7 en cuestión también puede sustituirse por un Galaxy S7 o Galaxy S7 Edge sin coste alguno. En este segundo caso, Samsung también sustituye y/o reemplaza todos los accesorios del Note 7 que se hubiesen adquirido y reembolsa la diferencia de precio entre ambos modelos. [via Sydney Morning Herald]