
El rover lunar Yutu no deja de darnos sorpresas. Tras el famoso caso del cubo (que resultó ser una peculiar formación de rocas) y del suelo pegajoso, ahora ha encontrado dos esferas de cristal translúcido de alrededor de dos centímetros de diámetro. Es la primera vez que se encuentran formaciones tan grandes y translúcidas.
Encontrar cristal en la Luna no es algo tan raro. Nuestro satélite es abundante en los ingredientes necesarios para crear cristal bajo las condiciones adecuadas de presión y temperatura. Esas condiciones se dieron hace miles de millones de años, cuando la Luna era joven y su superficie estaba azotada por una intensa actividad volcánica. Aquellos volcanes dejaron extensas coladas de lava hoy endurecida, cráteres, túneles y todo tipo de formaciones rocosas, incluidos cristales.
La segunda manera en la que se pueden formar esferas de cristal en la Luna es mediante el impacto de un meteorito. Las altísimas temperaturas y enormes presiones generadas por el impacto de un meteorito pueden hacer que fragmentos de roca fundida salten al aire, cayendo en forma de pequeñas esferas negruzcas denominadas tectitas.

La cuestión es que las esferas halladas por Yutu son demasiado grandes como para haber sido formadas por el impacto de un meteorito. Su tamaño de entre 15 y 25 mm hace pensar a los investigadores que su origen es volcánico. De hecho, no es la primera vez que encontramos esferas de cristal tan grandes en la Luna. Los astronautas de la misión Apolo 16 encontraron esferas cristalinas de 40mm de diámetro que pudieron relacionar con la presencia de un cráter volcánico cercano.
La cuestión, sin embargo, es que todas las esférulas que hemos encontrado hasta ahora en la Luna son relativamente opacas. Las halladas por el rover Yutu, sin embargo, parecen translúcidas o semitransparentes, algo que sí es nuevo en la exploración lunar. El rover Yutu no tiene instrumental para realizar un análisis de la composición de estas esferas, pero los científicos sospechan que son una variedad de tectitas quizá provocadas por un impacto reciente (ambas han sido halladas en el interior de un cráter). Otra opción es que estuvieran a más profundidad y el impacto las haya hecho salir a la superficie. Sea como sea, su estudio ofrecerá claves nuevas sobre el pasado geológico reciente de la Luna. [Science Bulletin vía Science Alert]