
De un tiempo a esta parte, los drones se han convertido en dramáticas armas de guerra, tanto en labores de vigilancia como de destrucción. Ucrania pudo interceptar un dron ruso recientemente, y en un vídeo muestran qué lleva en su interior y la tecnología que han incorporado los rusos en estos dispositivos.
El vídeo que se ha subido a la red es obra de la agencia de información del Ministerio de Defensa de Ucrania. En el mismo, se muestra a un soldado sentado junto a lo que dice ser un vehículo aéreo no tripulado (UAV) ruso Orlan-10 que se estrelló en algún punto de Ucrania.
Y lo cierto es que el clip muestra componentes bastante sorprendentes, aunque no desde un punto de vista innovador en cuanto a tecnología. Como explica el soldado que hace la disección, lo que hay es una tecnología “pobre” para ser un dron militar, de hecho, y como señalan, ciertos aspectos recuerdan más a un proyecto de avión RC para aficionados que a una pieza de tecnología de espionaje militar de alta tecnología.
En su interior encontraron que la cámara principal responsable de la captura de imágenes es una Canon EOS Rebel T6i (AKA 750D), una cámara DSLR lanzada en 2015 que actualmente vale entre $300 y $400 en el mercado de segunda mano. Además, la cámara está montada en una placa con una tira de sujeción de velcro.
No solo eso. El dial de modo de la cámara se ha congelado con pegamento, lo que evita que el modo de disparo de la cámara se cambie accidentalmente en pleno vuelo. En la parte superior del dron, la tapa del tanque de combustible sugiere que se hizo con algún tipo de botella de agua de plástico, y varias partes del dron también se fijan con algún tipo de cinta adhesiva.
Según la agencia de noticias ucraniana UNIAN, un dron que el Orlan-10 cuesta entre 87.000 y 120.000 dólares por unidad. Tal y como explican:
El Orlan-10 es desarrollado por Special Technological Center Ltd, con sede en Rusia. El casco y el motor están hechos en Rusia, sus componentes electrónicos vienen de Taiwán. Rusia a menudo usa este modelo en Donbass para reconocimiento y ajuste del fuego de artillería.

Por cierto, ahora que sabemos de dónde viene la cámara del interior de los drones rusos, recordamos que Canon Europa ya anunció en marzo que había suspendido todos los nuevos envíos de productos a Rusia en respuesta a la invasión de Ucrania por parte del país. [Petapixel]