El próximo mes de mayo, Alexander Gerst subirá a bordo de un cohete que le llevará, a él y a dos compañeros, hasta la Estación Espacial Internacional, donde pasará los próximos seis meses. Es el capítulo final de un viaje que comenzó en 2009, cuando la Agencia Espacial Europea seleccionó a este vulcanólogo alemán para convertirlo en astronauta. Ahora, Gerst cuenta como ha sido ese entrenamiento en su blog personal.
Tras ser seleccionado para el programa espacial, Gerst comenzó la primera fase de su preparación en septiembre de 2009. Durante año y medio, se entrenó en áreas que le eran completamente ajenas. La primera fase incluye ingeniería, medicina, mecánica orbital, pilotaje de naves, ruso y técnicas de supervivencia en diferentes entornos. Todo ello combinado con un entrenamiento deportivo intensivo.
Los astronautas que volaban solo en transbordadores solían recibir un entrenamiento más específico, pero los que visitan la ISS deben saber de todo, desde pilotar un transbordador ruso hasta hacer paseos espaciales. Tras la fase inicial, Gerst fue seleccionado para una misión. El entrenamiento continuó en instalaciones de la ESA en Canadá, Japón, Estados Unidos o Rusia con asignaturas como robótica, o hipergravedad, y largos entrenamientos en piscinas para simular paseos espaciales.
Gerst explica que la intensidad del entrenamiento de un astronauta distorsiona completamente el sentido del tiempo hasta que parece que llevas mucho mas que cuatro años. En ese tiempo, comenta este astronauta alemán, "los candidatos somos preparados para ser científicos, conserjes, limpiadores, pilotos, médicos, bomberos, ingenieros y conejillos de indias". Podéis seguir las aventuars de este nuevo explorador del espacio en su blog oficial. [Alexander Gerst vía ESA]
Fotos: ESA