
La variante Delta de Covid sigue siendo de lejos la que más problemas nos está causando, pero no es ni mucho menos la única. Científicos africanos han llamado la atención sobre la aparición de una nueva cepa con una característica importante: su índice de mutación es mucho más rápido.
La variante se llama C.1.2. y se detectó por primera vez en mayo de 2021. El primer estudio sobre ella lo han publicado investigadores del Centro de Investigación KwaZulu-Natal, en Sudáfrica.
De momento la C.1.2 no supone un motivo de preocupación inminente. No es más mortal, ni se contagia con más facilidad, ni causa síntomas más graves. La razón por la que los investigadores han llamado la atención sobre ella es que muta a un ritmo inusualmente alto. Concretamente, y a juzgar por la constelación de mutaciones que muestra, lo hace al doble del ritmo de las demás variantes. De momento no se tienen suficientes datos como para asegurar si las vacunas protegen o no contra esta nueva variante. Los primeros indicios parecen indicar que sí.
Al parecer la C.1.2 procede directamente de la cepa que originó la primera oleada de contagios en Sudáfrica. De momento su presencia en el país es residual. Solo está presente en el 3% de las muestras analizadas en el país, pero ha aumentado del 0,2% al 2% en solo un mes. Además de en Sudáfrica, la C.1.2 se ha detectado en algunas partes de China, Isla Mauricio, Nueva Zelanda y Reino Unido.
El ratio de mutación por sí solo no es motivo suficiente como para convertir a la C.1.2 en una variante preocupante o sobre la que se deba actuar de forma prioritaria, pero Sudáfrica ha sido el lugar donde aparecieron las variantes Delta y Beta, así que es bueno saber que los investigadores de allí ya están estudiando esta nueva versión. [MedRxiv vía Science Alert]