
Un exingeniero informático de la Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos (CIA) fue condenado por filtrar una gran cantidad de material clasificado que reveló algunas de las técnicas de hackeo más poderosas de la agencia. Joshua Schulte, de 33 años, trabajaba para un equipo de software de élite dentro de la CIA cuando robó un lote de documentos en 2016 y los compartió con Wikileaks, que publicó el material en 2017. Fue una de las peores filtraciones en la historia de la CIA.
Schulte fue declarado culpable de nueve cargos, incluyendo la recopilación y distribución ilegal de información de defensa nacional, por un jurado federal en Manhattan el miércoles 13 de julio. Las condenas podrían significarle hasta 80 años de prisión.
Los fiscales federales describieron a Schulte como un empleado descontento que había filtrado el material por resentimiento por cuestiones relacionadas con el trabajo. Mientras tanto, Schulte actuó como su propio abogado defensor en el caso, afirmando que lo habían señalado como un “chivo expiatorio” y que el caso en su contra era “una caza de brujas política”.
Damian Williams, el fiscal federal que procesó a Schulte, denunció al condenado en un comunicado el miércoles 13 de julio.
“Cuando Schulte comenzó a albergar resentimiento hacia la CIA, recolectó esas herramientas de manera encubierta y se las proporcionó a WikiLeaks, dando a conocer al público algunas de nuestras herramientas de inteligencia más críticas y, por lo tanto, a nuestros adversarios”, dijo Williams. “Hoy, Schulte ha sido condenado por uno de los actos de espionaje más descarados y dañinos en la historia de Estados Unidos”.
“Vault 7” constaba de unas 9.000 páginas y arrojaba luz sobre una serie de espeluznantes técnicas de hackeo utilizadas por la agencia. La filtración demostró que la CIA había desarrollado la capacidad de hackear televisores inteligentes y convertirlos en dispositivos de vigilancia (algo que parece salido de 1984), que había reclutado un ejército de hackers previamente desconocido y que esos guerreros del teclado trabajan las 24 horas del día para penetrar todo tipos de teléfonos inteligentes, sistemas operativos, servicios de comunicación populares como Skype e incluso software antivirus común. Según Wikileaks, la CIA también “acumuló” vulnerabilidades de día cero: errores desconocidos que podrían explotarse para obtener acceso a sistemas técnicos con una velocidad extrema. El gobierno dice que estas tácticas se utilizan para entrar en las redes de terroristas y adversarios extranjeros.
Schulte enfrentó un juicio previo por la filtración hace dos años, pero un jurado no pudo llegar a un acuerdo sobre la mayoría de los cargos en su contra, y el caso terminó en juicio nulo. Actualmente también enfrenta un juicio separado por presunta posesión de pornografía infantil, que según los agentes federales se encontró en sus dispositivos cuando registraron su casa en relación con el caso.