Volvo acaba de hacer oficial las especificaciones del XC40 2018, el SUV compacto que viene a seguir la estela del XC90 o el reciente XC60. Entre las novedades a destacar está el servicio Care by Volvo, es decir, la posibilidad de compartir el coche con otras personas a través de una llave digital.
El SUV tiene una longitud de 4,42 metros y su diseño recuerda mucho a los modelos XC90 y S90. En su interior, el modelo sigue los pasos de sus hermanos mayores, con una pantalla TFT de 12,3 pulgadas para la instrumentación, y un sistema multimedia que va ligado a otra pantalla (táctil) de 9 pulgadas.
Para su lanzamiento, y a la espera de confirmarse en todos los mercados, las versiones contarán con un sistema Haldex de tracción total unidas a una transmisión automática de 8 velocidades. La versión T5 de gasolina llegará con 250 caballos. Por parte de los diésel arrancará con el D4 de 190 caballos. EN cualquiera caso, Volvo explica que en el futuro podrían llegar los motores de tres cilindros y una versión híbrida.
La importante, sin embargo, es el sistema mencionado al comienzo: Care by Volvo. Se trata de una suscripción que permite al usuario compartir el vehículo con quien quiera a través de una llave digital y una app. Los suscriptores podrán usar el modelo a través de una cuota fija y sin tener que preocuparse de su mantenimiento. Algo muy parecido a lo que hacemos al comprar un teléfono a través de una compañía o cuando nos suscribimos en un servicio de streaming de música. Es el coche como servicio.
El usuario paga una tarifa plana para tener el coche, y el resto, desde los seguros hasta los impuestos y el mantenimiento, está cubierto por Volvo. También conseguimos un coche nuevo cada 24 meses y tenemos la opción de pedir prestado otros. La aplicación también permite compartir el coche con amigos y familiares a través de una “clave digital”.
Por cierto, los primeros XC40 serán enviados a principios del próximo año. Sale a la venta a partir de 35.200 dólares. [Jalopnik]