Cómo mejorarías el problema del tráfico en las grandes ciudades: ¿Ampliando el transporte público? ¿Construyendo carriles para bicicletas? En California, dos empresas privadas trabajan en soluciones más creativas: excavar túneles bajo la ciudad y crear una flota de taxis voladores.
El director ejecutivo de Uber, Dara Khosrowshahi, apuesta por el cielo. Según desveló a principios de esta semana en un evento en Tokio, UberAir, el prometido servicio de taxis voladores de Uber, empezará a funcionar antes de lo esperando, en un plazo de cinco a diez años.
Al igual que otras empresas como Airbus o Kitty Hawk (de Larry Page), Uber está desarrollando una flota de vehículos autónomos VTOL (que despegan y aterrizan en vertical) con la idea de transportar pasajeros entre las azoteas de los edificios y otros lugares donde quepan helipuertos.
Pero no todo el mundo se muestra optimista sobre estos primitivos “coches voladores”. Entre ellos Elon Musk, el fundador y director ejecutivo de The Boring Company, la empresa que apuesta por los túneles subterráneos. En su charla de Tokio, Dara Khosrowshahi dijo: “para qué excavar túneles cuando puedes volar”. Y Musk, por supuesto, no pudo quedarse callado.
“Si te gusta que los drones vuelen por encima de tu casa —escribió el empresario en Twitter— te encantará que haya un gran número de ‘coches voladores’ sobre tu cabeza que son mil veces más grandes y ruidosos, y que hacen que todo lo que no está clavado al suelo se vuele cuando aterrizan”.
Elon Musk es famoso por sus declaraciones subidas de tono, pero en lugar de ignorarlo, el CEO de Uber decidió contestar (con un tono amigable):
“Acepto el desafío —tuiteó Khosrowshahi—. La tecnología de las baterías ha mejorado (gracias a Elon Musk), y con múltiples rotores más pequeños [los vehículos VTOL] serán mucho más eficientes, al tiempo que evitarán la contaminación acústica y del medio ambiente”.
Musk no respondió y pasó directamente a otros temas como lo mucho que le gustaría que alguien hiciera realidad un Parque Jurásico.