
Elon Musk dejó caer algunas frases interesantes en un reciente evento para inversionistas de Tesla, entre las que se encontraba la revelación de que Lidar, una tecnología de escaneo basada en láser que crea imágenes 3D de objetos, es “algo estúpido” y que “cualquiera que confíe en LiDAR está condenado”. Esto sonaba bastante radical dada la cantidad de coches autónomos que confían en la tecnología, pero investigadores de la universidad de Cornell, Estados Unidos, han respaldado las predicciones de Musk gracias a un nuevo método para que los coches autónomos puedan ver el mundo en 3D usando un par de cámaras baratas.
Ser capaz de visualizar y detectar objetos alrededor de un vehículo en tres dimensiones es crucial para que los coches autónomos operen de manera segura, en un mundo donde las carreteras se comparten con otros vehículos, ciclistas y, a menudo, con peatones. Como conductor, cada vez que giras tu cabeza para escanear lo que hay alrededor de tu coche, tu cerebro visualiza instantáneamente tus alrededores en 3D y evalúa los posibles peligros. El uso de sensores baratos para detectar objetos cerca de un coche autónomo no es suficiente. Cuando te desplazas por la carretera a 100 kilómetros por hora, el coche debe ver lo que se aproxima y así poder planificar lo necesario para evitar los peligros.
Es por eso que es común ver sistemas Lidar (sistemas de detección de luz y rango) colocados sobre coches autónomos. Usando láseres giratorios, escanean los alrededores de un vehículo y generan imágenes en 3D de objetos cercanos y lejanos, lo que permite que el software analice los resultados e identifique cosas que deben ser evitadas. Sin embargo, Lidar es muy costoso, a menudo añadiendo unos 10.000 dólares en partes adicionales al precio de un coche, y necesita ser posicionado sobre el vehículo para obtener la mejor perspectiva. Actualmente la industria está intentando maximizar el rango de los coches eléctricos y de gas, por lo que un sistema Lidar añade mucha resistencia a la aerodinámica de un automóvil y su rendimiento.
En un estudio que se presentará en junio en la conferencia sobre visión por computadora y reconocimiento de patrones de 2019, llamado Pseudo-LiDAR de estimación visual de profundidad: reduciendo la brecha en la detección de Objetos 3D para la conducción autónoma, los investigadores de Cornell detallan un posible avance para los coches autónomos. Las cámaras generalmente se han considerado una tecnología inferior a Lidar, dado que a menudo se instalan en ángulos bajos, cerca del parachoques del coche, lo que da como resultado imágenes que tienden a distorsionar los objetos en la distancia, algo que confunde a las redes neuronales que intentan procesar e interpretar los datos.
Pero al colocar un par de cámaras a ambos lados de un vehículo detrás de su parabrisas, se producen imágenes estereoscópicas que se pueden convertir a datos 3D. Debido a que las imágenes se generan desde un punto de vista más alto, más cerca de donde se suelen instalar los sistemas Lidar, se determinó que los datos 3D, que fueron generados desde las cámaras, eran casi tan precisos como lo que los escáneres láser pueden generar, sin distorsión, y con un costo mucho menor.
Sin embargo, probablemente pasará mucho tiempo antes de que esta investigación llegue a los coches autónomos. Lidar sigue siendo confiable e increíblemente preciso, y las compañías que trabajan en estos automóviles actualmente están más preocupadas por la seguridad que por los costos. Pero a medida que la tecnología y el software mejoran, y las restricciones que limitan dónde y cuándo pueden circular los coches autónomos van desapareciendo, la autonomía al conducir pronto será un gran motivo de interés para los consumidores al buscar comprar un coche nuevo, y ellos sí que se preocupan por los costos. El enfoque de los investigadores Cornell hará que sea mucho más barato implementar características de autonomía en coches, y quizás con el tiempo podría hacer que Lidar se vuelva algo obsoleto.
¿Tal vez Musk tenía razón?