La carrera armamentística de la IA se ha intensificado esta semana con el anuncio de Bing Chat y Bard, los chatbots de Microsoft y Google que veremos pronto integrados en los buscadores de ambas compañías.
La rápida maniobra de Microsoft para integrar el modelo de lenguaje de OpenAI en su buscador ha sido vista con buenos ojos por los inversores, mientras que el anuncio de Bard ha dejado que desear en la bolsa. Irónico, teniendo en cuenta que Google es la inventora de los Transformers, las redes neuronales que se utilizan para este tipo de modelos (y la “T” de GPT).
Aparte de un evento con mal sonido que parecía improvisado, Google ha sido objeto de burlas por incluir un error en uno de los ejemplos promocionales de Bard. En el ejemplo, presentado en formato GIF en redes sociales y el blog de Google, se pregunta a Bard: “¿Qué nuevos descubrimientos del telescopio espacial James Webb puedo contarle a mi hijo de 9 años?”.
En su respuesta, Bard dice que el Webb tomó las primeras imágenes de exoplanetas, pero eso es falso. Según la NASA, las primeras imágenes de planetas más allá de nuestro sistema solar fueron capturadas por el Very Large Telescope del Observatorio Europeo Austral en 2004, aunque hay otras más recientes del telescopio espacial Hubble.
Bard y su respuesta falsa
Como ChatGPT, parece que Bard puede equivocarse y contestar erróneamente, pero pasar una respuesta errónea por alto y meter meterla en material promocional de la tecnología ha podido contribuir a una caída del 8% del valor de la acción en Google en las últimas 24 horas, según publica Reuters.
Además del error en el GIF, Google no pudo realizar una demo en vivo en el evento de París el miércoles por la mañana porque no aparecía el teléfono que habían configurado para la presentación. Cuando terminó el evento en vivo, Google eliminó inmediatamente el vídeo de su página de YouTube.
Cabe recordar que Bard es una versión ligera de LaMDA, el modelo de lenguaje conocido porque un ex empleado de Google decía que tenía consciencia. Según The Verge, será una versión “extremadamente limitada” para evitar erróres (y, sospechamos, no molestar a las empresas que dependen del tráfico orgánico de Google).
Es increíble pensar que Google, líder en desarrollo de inteligencia artificial, esté dando pasos en falso por la presión que supone el lanzamiento de ChatGPT desde noviembre. Pero así ha empezado este 2023.