Llevamos ya cerca de dos semanas de especulaciones en torno a las denominadas 'barcazas' (o gabarras) de Google. La primera de estas estructuras flotantes apareció en San Francisco. Después se avistó otra en Portland. Ahora Google ha reconocido oficialmente que esas moles flotantes de acceso restringido son suyas, pero su explicación arroja más preguntas que respuestas.
En 2009, Google logró una patente para construir centros de datos flotantes, y muchos se apresuraron a abrazar esa suposición. Otras teorías indicaban que las estructuras, construidas a base de contenedores, eran futuras tiendas o espacios de exhibición de productos de la compañía.
La explicación oficial de Google descarta su uso como centros de datos y parece orientarse más a su función como área de exhibición. Las palabras del departamento de comunicación de Google, sin embargo, lo mismo pueden referirse a un museo, a un showroom para Google Glass, a una tienda, o a una biblioteca. Esto es lo que han dicho:
La gabarra de Google... ¿Un centro de datos flotante? ¿Un lugar para hacer fiestas? ¿Una barcaza en la que esconder el último dinosaurio vivo? Lamentablemente no es ninguna de estas cosas. Aunque aún está en su primera fase de desarrollo y podría cambiar, estamos explorando usar esa gabarra como un espacio interactivo donde las personas puedan aprender sobre nuevas tecnologías.
En definitiva, que mejor esperemos hasta ver qué es lo que anuncian, o hasta que alguien consiga colarse en una de esas moles y vuelva para contarlo. Al menos tenemos la confirmación de que efectivamente es Google la que está detrás de las compañías que gestionan el proyecto. [TechCrunch]