Un hombre de Texas pensó que había acabado con una serpiente de cascabel decapitándola, pero se equivocaba, y el descuido casi le cuesta la vida. Cuando trató de recoger la cabeza del ofidio, este le mordió, liberando una dosis potencialmente fatal de veneno en su organismo.
La esposa de la víctima, Jennifer Sutcliffe, explicaba en la emisora KIIITV que los médicos dudaban de que su marido sobreviviera al encuentro. Por fortuna, se encuentra en recuperación, pero han hecho falta 26 viales de antídoto para salvarle. El cirujano de traumatología Michael Halpert comentaba al mismo noticiario que la función renal del paciente aún es débil, pero estable.
Según el informe policial, el hombre estaba trabajando en el jardín cuando vio la serpiente de cascabel de algo más de un metro y utilizó una pala para decapitarla. Cuando le mordió, su esposa lo trasladó de inmediato al hospital, pero comenzó a tener convulsiones por el camino. Finalmente un helicóptero lo evacuó de urgencia hasta el hospital.
“Es un tipo de error clásico. La gente no se da cuenta de que los reptiles y los mamíferos están conectados de forma diferente “, explicó a Gizmodo Leslie Boyer, médico experto en venenos y directora del Instituto VIPER en la Universidad de Arizona. “La cabeza de una serpiente de cascabel cortada puede continuar funcionando, incluso las glándulas venenosas, durante mucho tiempo después de separarse del cuerpo. De hecho, la otra mitad también sigue funcionando. Se levanta y sacude su cola como si siguiera entera “.
En lo que los expertos no se ponen de acuerdo es en cuánto tiempo duran las funciones tras la decapitación, ella no podría decirlo con certeza. Hay casos de serpientes que se siguen moviendo incluso 12 horas después de haber sido cortadas en dos. Hace años, Boyer fue consultada sobre un caso en el que alguien fue envenenado por una cabeza de serpiente momificada años después de la muerte del reptil.
Según esta experta, cortar una serpiente es una de las peores formas de manejar la situación. “Es cruel con el animal y te deja con una pieza más pequeña que es peligrosa de recoger”, dijo. Es mejor retroceder por lo menos dos pasos y llamar a un experto para eliminarlo. Boyer solo aconseja matar al animal si está en un espacio confinado del que no se puede sacar y es una amenaza inmediata.
Los primeros artículos sobre el incidente de Texas sugerían que las serpientes liberan más veneno muertas de lo que tendría si todavía estuvieran vivas. Boyer explica que no parece ser el caso. 26 viales de antídoto son solo un poco más que la cantidad promedio necesaria para salvar a la víctima de una mordedura de serpiente de cascabel.
No existen estadísticas fiables sobre mordeduras de serpientes en Estados Unidos, pero la mayoría de los expertos coinciden en que hay unos pocos miles de mordeduras de serpiente al año que resultan en alrededor de una docena de muertes. “En cuanto a si es mejor o peor que una serpiente te muerda postmortem: no hay ninguna diferencia”, dijo Boyer. “Muerta o viva, si las glándulas del veneno todavía están conectadas con los colmillos, puede vaciarlas dentro de tu cuerpo”. [vía KIIITV]