
Un equipo de expertos ha pasado seis años aplicando técnicas modernas de investigación para resolver un caso que lleva 77 años abierto: ¿quién entregó a Ana Frank y su familia a los nazis? Detrás de la traición estaría el notario judío Arnold van den Bergh, quien posiblemente reveló el escondite de los Frank a los nazis para salvar a su propia familia.
El equipo, formado por historiadores y otros expertos como el exagente del FBI Vince Pankoke, usó algoritmos de inteligencia artificial para encontrar conexiones entre muchas personas diferentes. Una base de datos de 66 GB y un mapeo de la Casa de atrás, que Ana Frank describió en su famoso diario, permitió a los investigadores comparar la detención de los Frank con las redadas en otros escondites y descartar que el descubrimiento fuera coincidencia, una de las hipótesis que había prevalecido con el tiempo.
Pankoke ha ofrecido entrevistas a los medios neerlandeses, así como al programa de la CBS 60 Minutes. La pista principal para resolver el caso fue una nota anónima enviada a Otto Frank, el padre de Ana, único superviviente del Holocausto en la familia. La nota, que identificaba a Arnold van den Bergh como informante, no se ha localizado, pero había una copia, mecanografiada por el propio Frank, en los archivos de una investigación anterior.

Pankoke cree que Otto Frank nunca hizo pública la nota para evitar más antisemitismo. “Tal vez sintió que si mencionaba esto avivaría aún más el fuego”, dijo a 60 Minutes. “Pero hay que tener en cuenta que el hecho de que [van den Bergh] fuera judío solo puede significar que los nazis lo colocaron en una posición insostenible para que hiciera algo por salvar su vida”.
El notario Arnold van den Bergh era un miembro destacado del Consejo Judío de Ámsterdam, un organismo que fue obligado a implementar la política nazi antes de su disolución en 1943, cuando la mayoría de sus miembros fueron enviados a campos de concentración. Van den Bergh, en cambio, siguió viviendo en Ámsterdam con normalidad.
La nueva investigación plantea que Arnold van den Bergh acabó perdiendo las protecciones que lo eximían de ir a los campos de concentración nazis y decidió dar una información valiosa a la Gestapo para que él y su familia estuvieran a salvo. El 4 de agosto de 1944, la policía nazi asaltó el escondite de los Frank y sus acompañantes (la familia van Pels y el dentista Fritz Pfeffer) en la parte trasera de la fábrica de Otto Frank.
Los resultados de la investigación aún tienen que ser revisados por expertos independientes. En un comunicado, el director del museo Anne Frank House se declaró “impresionado” con el trabajo y agregó que “ha generado nueva información importante y una hipótesis fascinante que amerita más investigación”.
El diario de Ana Frank es el relato de primera mano más famoso de la vida judía durante la Segunda Guerra Mundial. Ana murió de tifus en febrero o marzo de 1945, a los 15 años de edad, tras pasar por el campo de concentración de Auschwitz y acabar en Bergen-Belsen. El campo fue liberado por los británicos aproximadamente dos meses después de su muerte.
Arnold van den Bergh murió de cáncer en 1950, a los 65 años. Entonces vivía en Chelsea, Londres, y tenía tres hijos.