
Un micrometeorito que golpeó el Telescopio Espacial Webb a fines de mayo causó daños permanentes a la nave espacial, según un informe del Instituto de Ciencias del Telescopio Espacial.
El informe fue publicado a mediados de julio por la NASA y las agencias espaciales de Europa y de Canadá. Describió el desempeño científico del telescopio hasta el 12 de julio de 2022, el día en que se publicaron las primeras imágenes del telescopio, e incluyó una primera mirada emocionante del planeta Júpiter visto por Webb.
Según el análisis, el impacto “superó las expectativas previas al lanzamiento de daño para un solo micrometeorito”. El equipo de Webb ahora está estudiando cómo predecir y mitigar impactos futuros.
Los micrometeoitos son pedazos de roca que vuelan por el espacio. Cuando orbitan la Tierra, estas rocas pueden alcanzar velocidades de hasta 35.000 kilómetros por hora y son un peligro habitual para los astronautas, los satélites y las naves espaciales.
A principios de junio, un comunicado de la NASA indicó que un micrometeorito impactó uno de los espejos hexagonales del telescopio Webb entre el 23 y el 25 de mayo; el nuevo informe estima que el impacto realmente ocurrió entre el 22 y el 24 de mayo.
“Siempre supimos que Webb tendría que maniobrar en el entorno espacial, que incluye la luz ultravioleta fuerte y las partículas cargadas del Sol, los rayos cósmicos de fuentes exóticas en la galaxia y los impactos ocasionales de micrometeoritos (también conocidos como micrometeoroides) dentro de nuestro sistema solar”, dijo Paul Geithner, subdirector técnico de proyectos en el Centro de Vuelo Espacial Goddard de la NASA, en un comunicado de junio.
Los espejos del telescopio Webb se alinearon meticulosamente para producir imágenes de alta resolución de fuentes de luz muy tenues en el universo distante. El informe reciente comparó las mediciones terrestres de la calidad óptica de los segmentos del espejo con la calidad actual del telescopio; y encontraron un error significativo en el segmento C3.
Debido a que el segmento C3 es solo uno de los 18 espejos hexagonales que componen el espejo primario del telescopio, el daño del micrometeorito es relativamente pequeño en relación al nivel completo del telescopio, según el informe.
A pesar del daño, la evaluación inicial del equipo indica que Webb “debería cumplir con sus requisitos de rendimiento óptico durante muchos años”. Gracias al lanzamiento preciso del telescopio, se espera que esté operativo durante 20 años y pasará la totalidad de su mandato en L2, un punto en el espacio a 1,5 millones de kilómetros de la Tierra.

La gran incógnita, afirmó el equipo, es la tasa de degradación del espejo de los micrometeoritos; en otras palabras, cuántas partículas espaciales más dañinas de lo esperado golpearán el observatorio de 10.000 millones de dólares. En el momento de la declaración de junio sobre el evento de impacto de mayo, el equipo detectó cuatro impactos de micrometeoritos que estaban dentro de sus expectativas para tales eventos, pero el evento más grande es motivo de preocupación. Si Webb es más susceptible a los impactos de micrometeoritos de lo que anticiparon los científicos, sus espejos se degradarán antes de lo esperado.
Es posible que el equipo aleje la óptica de Webb de los impactos de micrometeoritos para proteger sus espejos en el futuro, pero para que eso suceda, es necesario anticipar los impactos. Webb se retrasó mucho aquí en la Tierra, pero para un observatorio que se lanzó y se puso en servicio sin problemas, era solo cuestión de tiempo antes de que el espacio algo un poco más compleicado a los científicos de Webb.