La próxima vez que vayas a un aeropuerto fíjate bien, es posible que te encuentres una zona con moqueta (o alfombras), o quizás más de una. De hecho, la mayoría de los grandes aeropuertos siguen manteniendo esta decoración algo antigua. Sin embargo, hay una razón lógica para ello.
Lo cierto es que actualmente la mayoría podría pensar que las terminales deberían estar diseñadas en su mayoría con pisos duros para que los viajeros y sus maletas con ruedas se muevan de forma eficaz, incluso para que sea más fácil para el personal del aeropuerto mantenerlo limpio.
Sin embargo, y de forma sorprendente, resulta que las alfombras y las moquetas son una de las muchas maneras en que los planificadores de aeropuertos han ideado cómo afectar a tu estado de ánimo y comportamiento.
Al parecer, cuando vemos un área enorme totalmente forrada con este alfombrado, hay una razón de peso: el dinero del pasajero. Este elemento de diseño tan simple ayuda a los viajeros a sentirse más relajados antes del despegue, ya que las alfombras brindan, al parecer, una sensación suave y acogedora, como la que uno puede encontrar en su propia sala de estar.
De hecho, las alfombras y la moqueta, junto con los techos bajos, la iluminación más natural y los asientos cómodos mientras se espera, fomentan la relajación entre los viajeros, quienes quizás estén algo estresados. Pero, ¿por qué? Porque un pasajero relajado en el aeropuerto es un pasajero algo más feliz y tranquilo, y estos tienden a gastar alrededor de un 7% más de dinero en los comercios minoristas que se pueden encontrar dentro, y un 10% más en los duty-free, según un estudio de la empresa de investigación DKMA.
No sólo eso, incluso ahora se va más allá del diseño de interiores. Muchos aeropuertos también están adoptando métodos poco ortodoxos para encontrar la serenidad del pasajero previa al vuelo, como agregar seas, o salas de yoga a sus terminales. Cualquier cosa es válida si al final el pasajero está más feliz, y su billetera más suelta. [TravelAndLeisure]