El público suele esperar una cosa bastante difícil en cuanto a los smartphones: cada vez más funcionalidades en móviles cada vez más pequeños. Con el G5, LG cree haber conseguido la forma de cumplir con estas expectativas gracias a usar módulos intercambiables.
Hace 18 años conocimos un dispositivo bastante similar: el Handspring Visor, desarrollado por los creadores del Palm Pilot. Era un PDA que parecía una especie de Game Boy gracias a contar con “cartuchos” intercambiables que le daban diferentes funcionalidades. Es una lástima que no fuera nada exitoso.
¿Tendrá LG más éxito con el G5 y sus módulos? En una época en la que todos los smartphones se ven como un aburrido rectángulo de cristal el G5 luce bastante atractivo y podría ser una alternativa viable, pero solo si sus módulos de verdad cumplen lo que prometen.
Eso no quiere decir que el G5 no tengan un buen hardware. El nuevo buque insignia de LG cuenta con una carcasa de metal, que no solo supone un cambio agradable del plástico que hasta ahora la compañía usaba en sus teléfonos, sino también es un cambio necesario si quieren competir con Apple y Samsung.
El G5 también corrige uno de los principales fallos de diseño del G4 y sus antecesores al reemplazar esas esquinas puntiagudas y grosor exagerado de los modelos anteriores por unas esquinas curvas y un cuerpo tan delgado que, entre estas dos características, lo convierten en un terminal muy agradable de sostener, algo muy importante dado que el G5 es considerablemente más grande que el iPhone 6s y el Galaxy S7, sus principales rivales.
Tengo una pequeña queja sobre el diseño del G5 y tiene que ver con la parte inferior del móvil donde se acoplan los módulos. Está hecha de plástico y se siente como si no perteneciera al móvil. Además tu dedo sentirá la unión entre la parte inferior y esta sección cada vez que vayas a presionar el botón Home, lo cual se siente raro.
En cuando al software del móvil, LG colocó su capa personalizada sobre la versión de Android Marshmallow, la cual se deshace del menú de aplicaciones y coloca a todas las apps que instales directamente en tu escritorio (como hace el iPhone). Si eso es un problema para ti, LG prometió ofrecer un launcher alternativo, además de que Google Play Store está lleno de launchers geniales y creados por terceros.
LG no está revolucionando en ningún aspecto con el software de su smartphone. De hecho, se siente como si la compañía finalmente se decidió a seguir los pasos de los otros fabricantes. Entonces, más allá de la fidelidad hacia una marca, ¿por qué alguien elegiría comprar el G5? LG está apostando en otras dos grandes características.
Para empezar tenemos las cámaras. Además de la cámara frontal de 8MP ideal para videollamadas (y selfies), el G5 tiene una cámara principal en la aprte posterior de 16 MP, acompañada de un tercer sensor con un lente de ángulo de 135 grados.
Añadir esa segunda cámara trasera con su lente de gran ángulo es algo que se le hará muy atractivo a los apasionados de la fotografía. En estas imágenes mostramos el antes y después de capturar fotos usando este lente, lo cual ofrece una imagen mucho más detallada y amplia de un escenario, además de que facilita mucho la tarea de tomar fotos grupales.
Este lente sin duda que ofrece muchas más posibilidades para ser creativo, especialmente cuando hacer un acercamiento es imposible. La mala noticia es que LG ha limitado la resolución de estas fotos a 8 MP.
No obstante, la aplicación de la cámara en el G5 es realmente buena y completa, aunque algunos de los iconos en la interfaz son un poco confusos al principio.
Para cambiar entre la cámara estándar y la cámara de ángulo amplio simplemente es necesario tocar un botón en la pantalla, aunque también cambia de forma automática cuando estás usando el zoom. El modo “manual” de la aplicación es bastante útil, lo que me tomó por sorpresa. Este te da control de la velocidad del disparador, el balance de blancos y más ajustes que harán felices a los fotógrafos.
Algunas imágenes capturadas con el LG G5
Estas fotos fueron tomadas usando el modo “automático” de la cámara.
Esta cámara de ángulo amplio es un gran paso en la evolución de los smartphones, pero no es nada en comparación a la característica más interesante del G5: la posibilidad de modificar inmediatamente su hardware con nuevas funciones y características gracias al uso de módulos intercambiables, a los que LG se refiere como... “Amigos”.
Para mostrar la mejor característica del nuevo LG G5 es necesario presionar un pequeño botón en la parte inferior izquierda de uno de los bordes del móvil. Una vez lo presiones desconectará cualquier módulo “Amigo” que estés utilizando. Pero al estar ubicado así es posible que alguien extraiga el módulo de forma accidental.
Cada uno de los módulos del G5 se conecta a la batería, lo que quiere decir que al extraer uno se apagará el móvil dado que su fuente de energía se vendrá con todo y “Amigo”.
Eso quiere decir que cambiar módulos no es tan rápido como quisiéramos. Sí, el proceso es bastante sencillo, pero debemos tomar en cuenta el tiempo que toma tener que apagar el móvil y después encenderlo de nuevo. Si LG hubiese encontrado la forma de cambiar los módulos sin que fuera necesario apagar el terminal habría sido genial.
Separar la batería del módulo también es un poco engorroso, lo suficiente como para que creas que lo estás haciendo mal. Pero no tiene ningún truco especial, simplemente debes aplicar un poco más de fuerza bruta de lo que imaginarías.
Ahora mismo están disponibles dos módulos en el mercado. El primero es un amplificador de audio digital a análogo llamado “Módulo Hi-Fi Plus”.
El otro es el módulo “Cámara Plus”, el cual demuestra el verdadero potencial de los módulos del G5. Muchas personas pasan más tiempo tomando fotos con el móvil que haciendo llamadas telefónicas, y este módulo permite que el terminal se sienta más como una cámara tradicional, lo cual es una gran noticia. Añade un pequeño agarre para que sea más fácil sostener tu teléfono con una sola mano, y una serie de controles manuales para la cámara, lo que evitará que debas estar tocando la pantalla tácil mientras tomas tus fotos.
Eso sí, aunque el G5 cuenta con un modo “manual” en la aplicación para la cámara, el módulo Cámara Plus no cuenta con ningún acceso rápido y manual a esa característica. ¿Qué es esa rueda que ves en la foto? Solo sirve para controlar el zoom. No existe ninguna opción para hacer que sirva para controlar la velocidad del disparador ni nada por el estilo.
Sobre el papel el G5 pareciera ser el smartphone ideal para los fotógrafos, pero la realidad es que el módulo Cámara Plus no va a convencer a nadie que se tome en serio la fotografía para dejar su cámara tradicional en casa.
Es difícil convencer a una persona de que compre un producto basándose en lo que podría llegar a hacer algún día, pero ese es el mayor atractivo actualmente del LG G5: su potencial.
El G5 cuenta con un hardware maravilloso y su cámara secundaria de ángulo amplio es razón suficiente para considerarlo al momento de elegir entre él, un iPhone 6s o un Galaxy S7.
Los smartphones son una maravilla tecnológica en comparación a lo que hacían los teléfonos móviles del pasado, pero también es cierto que con el tiempo se han convertido en monolitos de cristal aburridos. El G5 tiene el potencial de cambiar eso y recuperar su magia.
Un módulo de joystick o controles para videojuegos podrían convertir a este terminal, básicamente, en una consola portátil. Un módulo para escanear objetos para luego crear cosas usando impresión 3D también es otra idea maravillosa.
LG debería estar convencido acerca del potencial del G5. Sus módulos deberían ser su característica más anunciada y comentada, pero actualmente con la escasez de módulos diferentes esta característica se siente como una curiosidad, y no algo importante.
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