En los cómics, Peter Parker adquiere los poderes que le convierten en Spider-Man después de que le pique una araña radioactiva. El origen del personaje es un clásico en la cultura de los superhéroes, pero ¿qué tiene de cierto? ¿Qué nos pasaría en realidad si nos picara una araña altamente radioactiva?
En Because Science han recogido el testigo de esa pregunta y explican la famosa picadura desde un punto de vista científico en un vídeo imperdible.
El primer problema con la picadura de araña de Peter Parker es que en la vida real las picaduras de araña son mucho menos comunes de lo que creemos, y hay una buena razón para ello. De las aproximadamente 40.000 especies de arañas que conocemos y cuyo veneno puede ser peligroso para el ser humano, muy pocas de ellas realmente están equipadas con unas mandíbulas lo bastante potentes como para penetrar nuestra piel e inocularnos una cantidad suficiente de veneno.
Las arañas nos evitan y solo nos pican en situaciones de muchísimo estrés (para ellas). En eso Marvel acertó, porque la araña que pica a Peter acababa de ser bombardeada con radioactividad y no estaba muy contenta precisamente. Asumamos por un momento que la propia picadura tuvo lugar. La siguiente pregunta es ¿Con qué tipo de radiación la bombardearon?
La única respuesta posible en este caso es con neutrones. Los neutrones son la partícula que mejor puede hacer que una materia no radioactiva se vuelva radioactiva. Además, sabemos que las arañas pueden absorber una cantidad fantástica de radioactividad antes de morir, hasta 500 veces más que los seres humanos.
Pero no fue la araña en sí lo que dio a Peter sus poderes. Fue su veneno al entrar en el torrente sanguíneo, lo que obliga a calcular de cuánto veneno estamos hablando exactamente. Las temibles viudas negras apenas inoculan 0,02 miligramos de toxina. Asumamos que el veneno del arácnido ha absorbido una cantidad de radioactividad tan bestia que ahora es tan radioactivo como el plutonio (lo cuál es, de hecho, imposible). ¿Qué ocurre si nos inoculan 20 microgramos de plutonio disuelto en un líquido?
La respuesta corta es la misma que la del famoso meme de Spoderman que circulaba hace años cuando estaba de moda aquella parodia cutre del personaje...

Un veneno radioactivo como el plutonio nos provocaría intoxicación radioactiva y, muy probablemente, cáncer. El ADN roto por partículas radioactivas no provoca superpoderes, lamentablemente. Esa es la razón por la que, en sucesivos orígenes del personaje, los guionistas maquillaron la picadura con arañas radioactivas modificadas genéticamente de maneras siempre oscuras y misteriosas.
Pero ¿Y si el veneno una sustancia increíblemente radioactiva como, por ejemplo, Polonio-210? El pronóstico no mejora. Más bien al contrario. La dosis de 20 microgramos de este radioisótopo nos mataría en unos pocos días de la horrible manera que conocemos por series como Chernobyl. En solo un día habríamos absorbido una dosis 20 veces superior de radioactividad de la que es necesaria para matarnos con un 100% de efectividad. (un microgramo de Polonio-210 en el torrente sanguíneo). Pese a todo, lo más raro de Spider-Man desde el punto de vista científico es que la araña mordiera a Peter en primer lugar. [Because Science]