
Conoces el viejo lema: en el espacio, nadie puede oírte gritar. Pero estamos atrapados en esta roca nuestra que se calienta con rapidez, y podemos escucharnos a todos gritar muy bien, irónicamente también a los que aúllan sobre las particularidades del espacio mismo.
El consenso actual es que Plutón no es un planeta, a pesar de las quejas de los fanáticos de la astronomía. Y a pesar de que el hombre responsable de arrebatarle su designación intentó compensarnos a todos recientemente, el tema es que es muy poco probable que la Unión Astronómica Internacional retroceda en su decisión de 2006.
Quizás sea este caso desesperado lo que recientemente llevó a un grupo de científicos a levantar la mano y declarar que no solo queremos que Plutón vuelva a ser un planeta, queremos que se agreguen otros 150 planetas a la lista”.
Esa es la esencia de un nuevo estudio publicado en la revista de investigación Icarus que sostiene que la IAU está equivocada. Según desglosa NBC News, el equipo de científicos alega que el sistema de clasificación planetaria actual se basa en terminologías astrológicas obsoletas (léase: pseudocientíficas) y debería actualizarse para reflejar la era moderna.
Un “planeta”, por su definición, es “cualquier cuerpo geológicamente activo” en el espacio, que no solo llevaría a Plutón a su anterior designación, sino también a lunas como Europa, Encelado y Titán, así como al asteroide Ceres. En total, alrededor de 150 nuevos “planetas” para agregar a los ocho existentes.
Desafortunadamente, como explicó el geólogo planetario Paul Byrne, todo este vaivén sobre la taxonomía a menudo eclipsa muchos de los otros aspectos genuinamente fascinantes sobre estos cuerpos celestes de todos los tamaños. “Cada vez que daba una charla y ponía una imagen de Plutón, la primera pregunta no era sobre la geología del planeta, sino por qué fue degradado a planeta enano”, dijo a NBC News. “Eso es lo que se quedó la gente, y es una verdadera lástima”.
No nos malinterpretes; estamos seguros de que estas clasificaciones son importantes para todo tipo de investigaciones. Pero ya era bastante difícil memorizar los nueve planetas de niño. Dios ayude a la generación que necesite memorizar 150 planetas.