El Galaxy Note 8 es la nueva joya de la corona de Samsung. No obstante, también es el sucesor a la mayor catástrofe de la compañía surcoreana: el lanzamiento del Galaxy Note 7. El despiece del nuevo Note confirma que tiene una batería más pequeña y todos los cambios de diseño que tuvo el terminal para ser más seguro.
El Note 8 ha caído en las manos de iFixit, quienes han hecho lo que mejor saben hacer: desarmarlo por completo, estudiar sus partes y evaluar qué tan fácil será reparar el móvil. Sobre lo último, lamentablemente lo han calificado con un 4 sobre 10 (lo que lo hace prácticamente irreparable), pero de igual forma revelaron todas las mejoras de diseño que hizo Samsung para poder crear un móvil sin bordes y aún así encontrar espacio para incluir un lápiz stylus.
En una imagen obtenida mediante rayos X del móvil se puede apreciar cómo Samsung logró ordenar las piezas en el cuerpo del Note 8 para poder incluir el nuevo S Pen. Además, también se puede comprobar que la batería es más pequeña que la de su antecesor, el explosivo Note 7.
Originalmente el fallo del Note 7 tenía que ver con el tamaño de su batería de 3500 mAh y cómo sus contactos podían hacer cortocircuitos en el interior del móvil. Samsung creó una batería más pequeña y con nuevas regulaciones de seguridad para evitar que volviera a suceder, la cual está incluida en la nueva versión del Note 7, en el Galaxy S8 y en el Galaxy Note 8.
Esta batería, aunque más pequeña, viene acompañada de los nuevos procesadores Snapdragon y Exynos que, según la compañía, mejoran la gestión de energía y, por tanto, incrementan la duración de la batería. [vía iFixit]