El secreto detrás de la moneda virtual que esta causando sensación en Internet, es la minería de bitcoins. Desafortunadamente, este proceso requiere del poder de cómputo de los interesados para generar "bloques" y así conseguir bitcoins. El procesamiento, como es natural, supone un gasto energético y en gran escala, supone un impacto ambiental considerable.
¿A quién no le gustaría conseguir un poco de dinero con tan solo mantener prendido el ordenador? La idea es "fácil" instalas un software y donas un poco del poder de computo, que mejora si tienes una o varias tarjetas gráficas dedicadas para encontrar bloques. La probabilidad de que un usuario reciba un lote dependerá del poder computacional que esté aportando y es medido en MHash/s (Mega Hashes por segundo). Esto es similar al proyecto SETI@Home, solo que en lugar de ayudar a buscar vida extraterrestre, ganas dinero que puedes cambiar por cosas reales.
Sin embargo, no todo lo que brilla es oro. El costo de mantener millones de ordenadores "minando" es muy elevado en términos de consumo energético. Según el sitio de blockchain.info los mineros están consumiendo alrededor de 1.000 megavatios hora (MWh) de electricidad al día, tanto como la mitad de la electricidad necesaria para alimentar el Gran Colisionador de Hadrones.
Básicamente, la minería de bitcoins implica un costo de 150 mil dólares al día. Aunque esto parece no preocuparle a los mineros ya que en promedio están generando 681 mil dólares en ganancias, basadas en la cotización actual del Bitcoin.
La minería de Bitcoins podría tener un impacto ambiental, similar a la explotación de recursos naturales justificada para lo obtención materias primas. [Bloomberg]