Los teléfonos plegables están de moda, y por ello Samsung ha presentado su segundo modelo. Se trata del Galaxy Z Flip, el cual deja de lado el formato de “móvil que se transforma en tablet” del Galaxy Fold, optando por un diseño de tipo clamshell (almeja o concha), con una pantalla de cristal plegable de 6,7 pulgadas.
Samsung ha presentado al Z Flip junto con la nueva generación del Galaxy S20. Aunque el Z Flip no cuenta con las muchas cámaras del S20, incluye algunas características que podrían hacerlo un dispositivo plegable mucho más interesante que el Galaxy Fold del año pasado. Después de todo, en el ámbito de los teléfonos plegables tiene mucho más sentido un smartphone de tamaño estándar (6 pulgadas o poco más) que se transforma en algo mucho más portátil.
Y eso es justamente lo que hace el Z Flip.
Entre sus características, el Galaxy Z Flip cuenta con una pantalla plegable OLED de 6,7 pulgadas de cristal que, según Samsung, permite que el smartphone sea más delgado. En su exterior cuenta con una pequeña pantalla OLED de 1,1 pulgadas que muestra notificaciones, aunque para realizar cualquier tarea es necesario abrir el móvil. No obstante, si tocas la notificación en el panel externo eso dirigirá al usuario directamente a la aplicación correspondiente al abrir el teléfono.
La pequeña pantalla externa también puede ser usada para tomar fotos con el teléfono cerrado, usando la cámara dual principal, que consiste de un sensor de 12 MP ultra gran angular y otro sensor de 12 MP de gran angular. En su interior, cuenta con una cámara para selfies de 10 MP con apertura f/2.4.
De resto, el Galaxy Z Flip cuenta con un procesador de ocho núcleos y 64 bits, acompañado de 8 GB de memoria RAM y 256 GB de almacenamiento.
El Galaxy Z Flip estará disponible a partir del 14 de febrero a un precio de 1.380 dólares, y en tres colores: negro, violeta y dorado. Samsung asegura que ha diseñado la bisagra del Z Flip no solo para ser resistente, sino también para poder mantenerse doblada en tres posiciones distintas, para ofrecer una experiencia “manos libres” al llamar o realizar algunas tareas.
