Instalar una puerta gatera nos ahorra tener que estar todo el día abriendo y cerrando la puerta del jardín para que nuestro gato se de un garbeo por el vecindario. Petvation, además, usa reconocimiento facial para asegurarse de que lo que llega de vuelta sea nuestro gato y solo nuestro gato. También funciona con perros.
Que sepamos, y por lo que dicen en las películas, solo los velocirraptores saben abrir puertas usando el pomo. A resultas de este problema, las mascotas dependen de nosotros o de que instalemos una pequeña puerta por la que puedan salir y entrar a su antojo. El problema de las puertas, amigo lector, es que una vez las dejas abiertas ya no sabes lo que puede entrar. Normalmente son puertas demasiado pequeñas como para que entre un amigo de lo ajeno de tamaño humano, pero si vives en un lugar con mucha fauna de la de cuatro patas es posible que la entrada sea aprovechada por otros gatos, perros o incluso algún animal más exótico como mapaches, iguanas o niños del vecino.
Las puertas inteligentes para mascotas no son en absoluto una idea nueva, pero normalmente funcionan leyendo el mismo chip RFID que se implanta en las mascotas para encontrarlas en caso de que se pierdan (obligatorio en la mayor parte de países) o dependen de un collar electrónico específico. Ambos sistemas funcionan bien, pero los creadores de Petvation creen que se puede ir un poco más lejos.
En lugar de leer un chip, su cámara está dotada de cámaras infrarrojas a ambos lados que examinan el entorno en un ángulo de 120 grados para identificar a nuestras mascotas por su apariencia igual que los smartphones lo hacen con nuestra cara. Un sistema de algoritmos que operan localmente (no necesitan conexión a Internet) se encargan de identificar a nuestro gato entre todos los gatos. De hecho, el sistema viene configurado para reconocer automáticamente a otras especies invasoras y genera alertas en nuestro móvil en caso de que un mapache ronde nuestra puerta. No especifican si funciona con velocirraptores.
Según Petvation, no hace falta entrenar a nuestra mascota para que mire directamente a la cámara hasta que la puerta lo reconozca. De eso se encarga la puerta. Mala suerte sería que justo en ese momento otro gato del vecindario se marque una suplantación de identidad épica.
Una serie de sensores de movimiento y una cámara adicional justo en el arco se encargan de mantener la puerta abierta para que no atrape alguna extremidad del gato cuando este pase por ella. A priori, el sistema de Petvation parece más conveniente que un collar electrónico, pero si has usado lo suficiente un sistema de reconocimiento facial en móviles sabrás que no siempre funcionan como deben. Con todo, la puerta ha superado con creces la cantidad necesaria para financiarse en Kickstarter.
Los que apoyen la campaña recibirán su puerta Petvation en octubre a un precio de lanzamiento de 129 dólares. Eso suponiendo que la escasez de chips no retrase la fecha y que la campaña llegue a buen puerto. Con estas cosas de Kickstarter nunca se sabe.