
Si escuchas las palabras “simulador de vuelo”, probablemente te imagines un complejo setup lleno de pantallas gigantes y una cabina recreada minuciosamente con todo tipo de detalles que brinda a los entusiastas de los aviones la oportunidad de convertirse en pilotos sin tener que moverse de casa. Sin embargo, el “Simulador de vuelo alternativo” de Alex Shakespeare ofrece una experiencia completamente diferente: ser un pasajero en un vuelo comercial sin la recompensa de visitar un lugar exótico después de aterrizar.
Si el nombre de Alex Shakespeare te suena de algo (además de por ser posiblemente un pariente lejano del famoso dramaturgo), quizás se deba a que hace un año se hizo viral otra de sus creaciones: una falsa ventana que mostraba imágenes en directo de todo el mundo y que estaba controlada por un mapa físico y un pequeño avión magnético.
Aquel fue un proyecto divertido diseñado para ayudar a evitar la claustrofobia que muchos aún experimentaban como resultado de la pandemia, y la última creación de Shakespeare tiene ese mismo sentido para aquellos que aún no se sienten cómodos metidos en un tubo sellado de metal durante varios horas. Este simulador de vuelo alternativo adopta un enfoque pasivo y cambia los controles del piloto por una simple bandeja y una vista panorámica.
Usando distintas partes de aviones que ya habían quedado fuera de servicio, Shakespeare recreó una parte de un avión comercial con solo tres asientos, un panel superior funcional, varias bombillas fluorescentes y una ventana a través de la cual un monitor mostraba imágenes reales de vuelos, que se pueden seleccionar a través de un panel de control alimentado por una Raspberry Pi Zero.
El trabajo del pasajero es simplemente sentarse y disfrutar del vuelo, pero también puede interactuar con el panel superior, encender los ventiladores, las luces e incluso llamar a la tripulación de cabina con solo presionar un botón (que por supuesto reproduce el sonido que todos tenemos grabados en la cabeza). La mejor característica es que al presionar el botón de llamada se activa un mensaje de asistencia requerida que se reproduce en todos los dispositivos compatibles con Google Assistant que hay en la casa de Shakespeare.