
Samsung se ha aliado con Xiaomi para diseñar el primer sensor fotográfico para smartphones de 108MP. Con un tamaño de 1/1,33 pulgadas, mide casi el doble que el sensor principal del Galaxy Note 10 y solo un 25% menos que el sensor de la Sony RX100 IV, una de las cámaras compactas más populares de la industria.
Al igual que su predecesor, el nuevo Samsung ISOCELL Bright HMX se basa en píxeles de 0,8 micras, pero gracias a su enorme tamaño contiene la friolera de 108 millones de puntos y produce fotos de 12.032 x 9024 píxeles. También va más allá en vídeo: el nuevo sensor admite grabaciones sin pérdidas de campo de visión de resolución 6K (6016 x 3384 píxeles) a 30 cuadros por segundo.
Así que, es oficial: la guerra de los megapíxeles ha vuelto. Y aunque los 108MP solo garanticen imágenes más grandes y definidas, Samsung tiene varias tecnologías bajo el capó para mejorar el rendimiento del sensor en condiciones de iluminación extremas. Según un comunicado de prensa, el HMX puede absorber más luz en entornos de poca luz que sensores más pequeños porque imita el comportamiento de los sensores con píxeles más grandes fusionando cuatro píxeles en uno, una tecnología de pixel binning que Samsung denomina Tetracell y que, en el caso del ISOCELL Bright HMX, produce imágenes de 27MP.
En un entorno brillante, en cambio, un mecanismo llamado Smart-ISO selecciona de forma automática el nivel de ganancia más bajo para producir fotos con colores más saturados y vívidos. El mismo mecanismo usa un ISO alto en escenas más oscuras para reducir el ruido y generar imágenes más claras.
El sensor Samsung ISOCELL Bright HMX aún no está en ningún teléfono, pero Xiaomi anunció que sería la primera marca en estrenarlo.