
Cuando Juego de Tronos terminó en 2019, HBO ya sabía que quería seguir haciendo series basadas en el mundo de Canción de Hielo y Fuego. La productora barajó diferentes ideas. Unas, como la nueva serie sobre los Targaryen, sobrevivieron y otras no. Lo que no sabíamos es que llegaron a rodar un episodio entero de una de ellas y que costó una fortuna.
El escritor James Andrew Miller está a punto de publicar un libro titulado Tinderbox: HBO’s Ruthless Pursuit of New Frontiers en el que pasa revista a la a veces titánica tarea de HBO a la hora de crear nuevas series. Según Insider, en ese libro Andrew Miller detalla que el piloto de la serie cancelada de Juego de Tronos costó la friolera de 30 millones de dólares. “Se gastaron 30 millones en el piloto de una precuela que estaba en producción cuando yo llegué a HBO”, explica en el libro el ex presidente de Warner Media Entertaiment Bob Greenblat. “Unos meses más tarde vi un fragmento del episodio y le dije a Casey (Casey Bloys, jefe de contenidos) que no funcionaba bien y que no creía que estuviese a la altura de la serie original. Él estuvo de acuerdo, lo que en realidad fue un alivio para mi.”
La serie estaba ambientada miles de años antes de los eventos de Canción de Fuego y Hielo, y contaba la historia de como Westeros pasó de la era dorada de los héroes a la primera larga noche que tanto citan en Juego de Tronos. El show estaba escrito por Jane Goldman (autora de los guiones de Kick-Ass y Kingman), y contaba con Naomi Watts, Miranda Richardson (Rita Skeeter en la saga Harry Potter), Naomi Ackie (Jannah en The Rise of Skywalker) y Georgie Henley (Las Crónicas de Narnia) al frente del reparto.
“Desafortunadamente, decidimos desconectar el soporte vital de la serie”, añade Greenblatt. “Había una presión enorme por que quedara bien, y creo que no hubiera funcionado. Meses más tarde de aquella cancelación, Bloys añadió algo de contexto durante una entrevista a Deadline. “Cuando una serie está en desarrollo y se hace un piloto a veces las cosas salen, y otras no. Uno de las retos que Jane Goldman supo hacer de manera brillante fue recrear un mundo del que realidad no sabíamos nada porque tenía lugar 8.000 años antes de los eventos de la serie original. No es lo mismo que House of the Dragon, donde ya existe un material original (una novela) como punto de partida.”
House of the Dragon es una serie que definitivamente va a estrenarse en algún momento de 2022, y Greenblatt tiene mucho mérito (o culpa, ya veremos) en ello. “Fuí yo quien convenció a Casey de dar luz verde a la serie. Pero le pedí que no arriesgáramos 30 millones en un piloto para luego no hacerla. -No hagas un piloto-, le dije. Hagamos una gran serie de la que podamos sentirnos orgullosos.” Aparentemente, lo lograron. Podremos ver los resultados en algún momento de 2022. [Insider]