
Intel recientemente anunció que tiene una línea completamente nueva de procesadores de la serie X, y ahora la compañía ha revelado sus datos de rendimiento, precios y un nuevo y flamante procesador Xeon. Combinar todo esto parece sugerir que Intel podría quiere atrapar a las personas que desean procesadores con muchos núcleos.
Intel no fabrica malos procesadores, pero definitivamente siento que la compañía ha estado cobrando de más por sus procesadores más sofisticados en los últimos años. La generación anterior de procesadores de la serie X se vendió por hasta 1.700 dólares, mientras que los procesadores Xeon W más orientados a profesionales, con soporte para cosas como memoria de código de corrección de errores, se vendieron por hasta 2.553 dólares, en el caso del W-2195 de 18 núcleos. Dado que un procesador AMD Threadripper de 32 núcleos tiene un precio máximo de 1.800 dólares, los procesadores de Intel últimamente han parecido un mal negocio.
Con su décima generación de procesadores, Intel está tratando de cambiar eso. La nueva serie Xeon W-2200 incluye el W-2295 como modelo más avanzado, el cual tiene 18 núcleos, 36 hilos, soporte para hasta 1TB de RAM y se vende por 1.333 dólares. Intel dice que ha puesto mucho trabajo en las habilidades de inteligencia artificial del nuevo chip, asegurando que esta nueva serie de procesadores Xeon W es hasta 2,2 veces más rápido que la generación anterior en tareas intensivas de inteligencia artificial, tales como el procesamiento de imágenes, y entre 10% y 11% más rápido en tareas más tradicionales de procesadores como la edición 4K, la compilación de software y renderizado 3D.
Intel me permitió dar un vistazo a ese rendimiento. La configuración fue relativamente simple: dos sistemas de trabajo idénticos se encargaron de abrir y renderizar un gran archivo 4K. Uno de estos sistemas tenía el procesador W-2195 de la generación anterior, mientras que el otro tenía el W-2295 de este año. Cada ordenador ejecutó exactamente la misma tarea varias veces seguidas. En promedio, el W-2295 realizó el renderizado 4K en 106 segundos, mientras que el W-2195 lo hizo en 130 segundos.
Esa es una mejora realmente sólida en el rendimiento de un procesador que cuesta 1.200 dólares menos que la generación anterior.
Además de la serie W-2200, Intel también tiene la nueva serie X de décima generación, cuyo modelo de tope de gama es el Intel Core i9-10980XE Extreme Edition de 18 núcleos. Ese procesador tendrá un costo de 980 dólares, menos de la mitad del precio del procesador más avanzado de la serie X de la generación anterior. Intel dice que estiman que la nueva serie X debe ser un 7% más rápida en promedio, aunque mantendrá el mismo salto considerable en el rendimiento en las tareas de inteligencia artificial que la serie Xeon W-2200 (es decir, 2,2 veces más rápido que la generación anterior).
Las caídas de precios no se limitan solo a los procesadores de ultra alta gama destinados a streamers, profesionales y gamers con demasiado dinero. Intel también ha reducido los precios en su línea de procesadores de la serie S de novena generación. Estos CPU tienden a ser un poco más baratas, dado que no incluyen una GPU integrada, lo que los hace ideales para los jugadores que de por sí ya planeaban comprar una GPU separada de AMD o Nvidia.
Si deseas tener un Intel dentro de tu próximo ordenador de escritorio para juegos, la compañía lo está haciendo mucho más atractivo. Sin embargo, no sabremos cómo se compara con la última versión de procesadores AMD Ryzen hasta que probemos estas nuevas CPU nosotros mismos. Intel dice que las nuevas series de procesadores Xeon W y X estarán disponibles a partir de noviembre. Por otro lado, la nueva serie S con precios reducidos ya está disponible.