
Con el reciente batacazo en taquilla de Animales fantásticos: los secretos de Dumbledore, el nuevo CEO de Warner Bros., David Zaslav, quiere volver a la esencia de Harry Potter, pero antes tendrá que convencer a la autora J.K. Rowling.
Según un reportaje de Puck, Zaslav necesita a Rowling más de lo que ella lo necesita a él. La autora controla la propiedad intelectual de la saga hasta tal punto que Warner le permitió escribir los guiones de Animales fantásticos, aunque no tuviera experiencia como guionista. Y si bien la primera película recaudó 814 millones de dólares en todo el mundo, ni los fans ni la crítica la aceptaron. La segunda película recaudó 654 millones, y la tercera ha recaudado 405, convirtiéndose en la primera producción del universo de Harry Potter en perder dinero.
Ahora Zaslav ha retomado la idea de uno de sus predecesores: adaptar en dos películas la obra de teatro Harry Potter y el legado maldito, que ha sido un éxito en Londres y Broadway. Con una historia coescrita por Rowling, la obra de cinco horas se desarrolla 19 años después de los eventos de Harry Potter, incluyendo a los protagonistas de la saga original y sus hijos.
La duología tiene todos los ingredientes para volver locos a los fans, pero Rowling ya rechazó la idea en el pasado, quizá porque habría sido como admitir que Animales fantásticos no estaba funcionando. Y aunque la autora pueda cambiar de opinión, los problemas van más allá de lo que tenga que decir. Rowling ha estado cosechando polémicas en redes sociales por sus comentarios sobre el colectivo trans, haciendo que los actores de las películas de Harry Potter, Daniel Radcliffe y Emma Watson, se distanciaran de ella y de sus palabras.
Por otro lado, los actores apenas superan los 30 años y tendrían que ser caracterizados para parecer un poco más adultos (esperemos que con mejor resultado que en el epílogo de la última película). Radcliffe, además, ha jurado no volver a interpretar jamás el papel de Potter (pero tal vez tenga un precio).
En cualquier caso, no hay películas ni series de televisión en desarrollo, así que lo que Zaslav consiga sacarse del sombrero no verá la luz hasta 2025 o más tarde, ya sea Harry Potter y el legado maldito, un remake de las películas o una serie de televisión para HBO Max.