Los afortunados turistas que hayan visitado el Gran Cañón estos días han podido disfrutar de una imagen única. La profunda garganta por la que serpentea el río Colorado ha estado cubierta por una densa capa de nubes que han permitido tomar unas fotos tan espectaculares como inusuales.
Ese río de nubes se debe a un fenómeno meteorológico poco común llamado Inversión Térmica. Este fenómeno ocurre cuando las capas de aire frío y caliente (que suelen estar una encima de la otra en condiciones atmosféricas normales) invierten su posición. Normalmente se produce porque el suelo se enfría muy rápidamente, creando una capa de aire frío que se mantiene por debajo de la capa de aire caliente. Esta disposición retiene el vapor de agua y hace que las nubes se queden a ras de tierra.
Las largas noches despejadas y los suaves vientos que han imperado en la región del Gran Cañón estos días son los causantes de esta situación que los responsables de Parques Nacionales de Estados Unidos no han dudado en calificar como algo que sucede una vez en la vida. Os dejamos con unas cuantas fotos más de este hermoso fenómeno. [El Gran Cañón en Facebook]
Fotos: Erin Whitaker, guardia forestal del Gran Cañón