La respuesta es afirmativa. El proyectil retiene sus capacidades incluso a velocidad subsónica, aunque el agujero que deja es considerablemente más pequeño. También conserva todo su potencial incendiario, aunque serían necesarias más pruebas para saber hasta qué punto. El proyectil MK211 es tan dañino que algunos ejércitos como el de Noruega lo considera munición exclusivamente anti-vehículo, no antipersona. El comité Internacional de la Cruz Roja ha tratado de prohibir su uso sin éxito. [FullMag]