
Por cada proyecto de origen militar que acaba teniendo una versiĂłn civil, suele haber varios que se quedan en el camino de manera más o menos catastrĂłfica. BAE Systems (que es la segunda compañĂa de ingenierĂa más grande al servicio del ejĂ©rcito) acaba de hacer pĂşblicos nuevos e interesantes datos sobre cuatro proyectos de los años 60 que acabaron archivados o estrellados contra el suelo.
El todoterreno volador
Durante la segunda guerra mundial, ambos bandos juguetearon con la idea de fabricar un coche volador con el que esquivar mejor los obstáculos, pero los únicos prototipos que se construyeron eran más un aberrante cruce entre todoterreno y helicóptero que otra cosa.
Advertisement
En los 60, BAE Systems desarrollĂł un vehĂculo todoterreno capaz de dar breves saltos gracias a un sistema de hĂ©lices incrustadas en su carrocerĂa. Recortes presupuestarios en defensa acabaron dando carpetazo al proyecto.
La plataforma de despegue vertical
La mayor parte de jets están pensados para despegar sobre una pista larga. Como modificar los motores de esos aviones era muy caro y reducĂa su velocidad en el aire, el ejĂ©rcito se planteĂł desarrollar una plataforma capaz de elevar un aviĂłn convencional hasta una altura en la que pudiese despegar sin problema.
Advertisement
La idea estaba pensada para facilitar el despegue desde lugares remotos o sin pista de aterrizaje, asà como para transporte aéreo pesado. No obstante, la lógica y el presupuesto se encargaron de cancelar este monstruo de 56 motores.
El transbordador-sandwich
El nombre en clave de este proyecto era Mustard (mostaza) y la idea, en realidad, era bastante buena. Lo que se intentaba era no tener que desechar los motores que impulsan los transbordadores espaciales hasta su Ăłrbita. Para ello se diseñó este sistema de tres aeronaves unidas. Las dos de la parte externa eran capaces, en teorĂa, de alcanzar velocidad Mach-5.
Advertisement
Una vez en Ăłrbita, los propulsores estaban pensados para volver automáticamente a tierra para ser reutilizados. Se decĂa que utilizar el Mustard hubiera ahorrado 20 o 30 veces el presupuesto utilizado para los cohetes Saturn, pero la idea estaba probablemente adelantada a su tiempo. Nunca pasĂł de la mesa de diseño.
El aviĂłn de pasajeros de despegue vertical
La idea era basarse en el mĂtico Harrier para diseñar un aviĂłn de pasajeros que fuese capaz de despegar en vertical, ahorrando asĂ la necesidad de construir pistas y más pistas en los aeropuertos. El aviĂłn, sin embargo, no podĂa utilizar propulsiĂłn dirigida como el Harrier, sino que se basaba en una hilera de turbinas en su panza.
Advertisement
Al final, el sistema era demasiado caro y poco práctico porque limitaba mucho el nĂşmero de pasajeros que podĂa transportar el aviĂłn, asĂ que fue cancelado.
El Hércules con 'modo turbo'
Os dejamos con un pequeño extra relacionado con el despegue vertical. Durante la crisis de rehenes de los años 80 en Irán, Estados Unidos intentó modificar aviones de carga para que fuesen capaces de aterrizar en pistas muy pequeñas. Para ello dotó a varios aviones Hércules C130 de retropropulsores con los que frenar y acelerar en una distancia récord.
Advertisement
Durante uno de los test finales, un piloto encendiĂł los motores auxiliares antes de tocar el suelo. El resultado lo tenĂ©is en este vĂdeo (a partir del minuto 2:00). El proyecto fue cancelado y no sabemos si algĂşn ingeniero aeronáutico fue dañado en el proceso.