
Desde hace ya tiempo, ciertos móviles ofrecen carga inalámbrica inversa. Pero reconozcámoslo, nunca nos acordamos de que está ahí y al final no le acabamos dando ningún uso a esta función. Sin embargo, Google ha dado con un truco tan simple como ingenioso: hacer que su nuevo Pixel 5 se convierta en una base de carga inalámbrica tan pronto como le conectamos un cable USB-C, según han descubierto en 9to5Google.
La opción de compartir batería se activará de forma automática al detectar que hay un cable USB-C conectado y que está cargando el teléfono, claro. Si durante los próximos 30 segundos no colocas ningún dispositivo compatible con carga inalámbrica, esta opción se desactivará automáticamente, y lo mismo ocurrirá si detecta que el dispositivo que estás intentando cargar ya tiene la batería al máximo.
Pero no necesitas tener conectado un cargador para poder aprovechar esta opción y la podrás activar siempre que quieras de forma manual desde el menú del teléfono.